“Nos estamos levantando como nación. Paraguay ha progresado muchísimo en los últimos 34 años, en los últimos 70 años, en el último siglo. Podemos acelerar ese proceso de evolución”, afirmó el presidente de la República, Santiago Peña, al abrir el miércoles la presentación denominada “Paraguay: el resurgir de un gigante” en el Salón de Convenciones del Banco Central del Paraguay (BCP), ante la presencia de más de 1.000 empresarios.
“Estamos ante una oportunidad única. Me toca mirar con un tremendo optimismo. Paraguay viene transitando este proceso de recuperación y estamos en puertas de dar uno de los mayores saltos”, comentó Peña, en la segunda actividad de su primera jornada de gobierno. “Esta oportunidad está construida sobre cimientos, sobre bases que hemos construido los paraguayos. La estabilidad que hemos consolidado es la victoria de la sociedad”.
El mandatario explicó que nuestro país ya fue una potencia económica, con desarrollo productivo e industrias de acero, y uno de los símbolos de esta fortaleza es la obtención del tren a vapor, apenas 10 años después que el Reino Unido haya inaugurado este medio de transporte. “La base de ese desarrollo fue la educación y la base de ese trabajo de permitir que el Paraguay se pueda desarrollar”, comentó.
Estas virtudes fueron frenadas por la tragedia de la guerra contra la Triple Alianza, a la cual calificó como un fratricidio que significó un quiebre abrupto, que tuvo un gran impacto en el desarrollo del país. No obstante, argumentó que nuestra nación logró registrar un crecimiento gradual en el último siglo.
BONANZA
“Partimos de un problema de bonanza, somos demasiado ricos en aquello que el mundo necesita. Tenemos un capital enorme y una población joven que está deseosa de aprender”, detalló. A su vez, agregó las bondades de la tierra fértil y que estamos rodeados de ríos que no solo permiten movilizar el comercio, sino también aseguran la generación de energía limpia y renovable.
Destacó la cercanía con Brasil, la octava economía más grande del mundo, que entendió que el progreso del Paraguay no va en detrimento del suyo. “He tenido la oportunidad de reunirme tres veces con el presidente Lula da Silva y me ha dicho que su determinación en su tercer mandato es todavía mayor para trabajar por el desarrollo de nuestro país”, acotó Peña, enfatizando que lo mismo ocurre con los demás socios vecinos.
HIDROVÍA PARAGUAY-PARANÁ
En otro instante, se refirió hacia la hidrovía Paraguay-Paraná y la capacidad de los sectores para producir mucho más y movilizar ese desarrollo a los mercados gracias a la vía navegable que es utilizada en menos del 10 %. “Es un desafío de la integración que va a involucrar a 5 países, porque no solo es importante para un país sin litoral marítimo, sino que es fundamental para Bolivia o Brasil y sus estados como Mato Grosso y Mato Grosso do Sul, que son más mediterráneos”, afirmó.
El gran desafío real será cómo alimentamos a una población que va a crecer un tercio en los próximos 30 años y que se duplicará demandando más alimentos. “No existe una región fuera de Sudamérica que sea capaz de producir alimentos para su población y alimentar a otras del mundo. Nosotros tenemos la capacidad de hacerlo”, apuntó sobre la posición estratégica y envidiable en la que está ubicada el país para ello.