El candidato presidencial por el movimiento Nueva República, Euclides Acevedo, repudió la persecución política desatada por su contrincante de la Concertación, Efraín Alegre (PLRA), en contra de los trabajadores públicos tras afirmar mediante un discurso populista que de llegar al poder terminará por erradicar la “fiesta de privilegios” en la que supuestamente viven los trabajadores estatales.
Al respecto, el ex ministro del Interior y ex canciller argumentó que lo correcto debería ser dignificar el trabajo que desempeña el sector al sostener que es el recurso humano del Estado, afirmando que uno de los principales ejes de su proyecto de gobierno junto con el senador del Frente Guasu Jorge Querey, como su vicepresidente de la República, será darle protagonismo a las distintas organizaciones que nuclean a los funcionarios.
Mediante un encuentro mantenido con los miembros del Frente Sindical de Funcionarios Públicos y el sindicato de mujeres del Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC), Acevedo argumentó: “Nosotros queremos la reivindicación del funcionariado, ustedes no pueden trabajar con un salario poco digno, ni ser perseguidos por los derechos adquiridos, ni por la sucesión del gobierno”, aseveró.
Asimismo, el presidenciable de la oposición expresó que será fundamental que en el próximo gobierno se implemente la carrera administrativa, así como la adecuación salarial para los trabajadores que lleguen a la etapa de la jubilación. El encuentro se concretó ante la preocupación que despertó las afirmaciones de Alegre en los trabajadores del Estado.
El liberal había anunciado que aplicará una política de austeridad y, además, dejó entrever que hará una poda a los trabajadores públicos, donde dijo que “hay muchos privilegios”. “La ciudadanía puede estar segura de que nosotros no solamente vamos a trabajar con patriotismo, sino que vamos a tener una política de austeridad”, indicó Alegre, olvidando que su gestión al frente del MOPC, entre el 2008 y 2011, fue cuestionada por supuestos malos manejos administrativos, y que le habría valido su destitución por el entonces mandatario Fernando Lugo.