Que el popular Tiríka iba a ser usado en el Palacio de Gobierno el lunes siguiente de los Jue­gos Odesur estaba más can­tando que el Himno Nacional. La culpa no la tiene la mara­villosa mascota del Odesur sino su altísima popularidad y simpatía. Esa condición lo convirtió ya hace una semana en un “objeto deseado” por los asesores del Gobierno que si algo tienen a borboto­nes es la rastrera obviedad.

Así es como el mismo Presi­dente que trató de obstruir en dos ocasiones la realiza­ción de los Juegos Odesur, no solo se tomó su soñada foto con Tiríka sino para hacerlo cruzó todo el Palacio, hizo que los fotógrafos de la cober­tura presidencial lo siguieran hasta el salón principal de la planta alta y ante el cuadro del Mariscal López, se hizo la foto oficial con el gato montés simbólico de los Juegos.

Un triste instante en el que un presidente busca desespera­damente que la mascota de un certamen que es mucho más querida que él, le saque por un momento de la impopulari­dad. Una delicia tragicómica para los estudiosos del mar­keting político y la semiótica.

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QUEMANDO LO QUE MÁS QUEREMOS

Pero al mismo tiempo, el uso político que el oficialismo ha generado en torno al sím­bolo de los Juegos está que­mando un elemento simbó­lico que hubiera quedado, por la inexistente grandeza de los mandantes, al margen del despilfarro político que solo dilapida, nunca multiplica.

IMPOPULAR

Una publicación del pasado 12 de junio del diario Última Hora, que cita a la Celag como fuente, señala que 8 de cada diez ciudadanos tiene imagen negativa del hijo de la mano derecha del dictador Stroess­ner, convertido en presidente.

El 81% de los encuestados observó como negativa la imagen de Mario Abdo Bení­tez, señala el Centro Estra­tégico Latinoamericano de Geopolítica, replicando un diagnóstico que salta en diversas encuestas, en las que además, camina con tenden­cia a la derrota en las eleccio­nes de diciembre pese a que Natalia Zuccolillo, dueña de Abc Color y el zar del nego­cio de fronteras, Antonio J. Vierci, propietario del Grupo Vierci, pusieron todos sus medios para frecuentes tours de Marito y sus candidatos.

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