Por Macarena Duarte, macarena.duarte@nacionmedia.com
Desamparo, desesperación y decepción, de este modo Raquel Cabrera describe su realidad luego del fallecimiento de su marido, el comisario Raúl Villalba. Hace más de un año que el covid-19 le arrebató la vida, dejando huérfanos a tres hijos y con una serie de necesidades sin atender, debido a que el Senado negó el ascenso póstumo de Villalba, lo cual ayudaría en gran medida a su familia.
“Se supone que los senadores deben ayudar a la sociedad, pero con este tipo de acciones en realidad nos matan. Ya estoy pasando un año y tres meses de miseria con mis hijos porque no le dan su ascenso póstumo a mi marido, cuando esto representa un derecho para él y su familia”, destacó Raquel con angustia e impotencia, en una entrevista con La Nación/Nación Media.
El derecho exigido por la familia del comisario fallecido corresponde a la solicitud realizada por el Ministerio del Interior para un acuerdo constitucional correspondiente para el ascenso póstumo al grado inmediato superior a oficiales comisarios, de conformidad a la Constitución Nacional y la Ley N° 222/1993 y su modificatoria Ley 5757/16.
No obstante, desde el Senado argumentan que el solicitado ascenso póstumo no corresponde debido a que el comisario Villalba posee un sumario administrativo abierto, lo cual es mentira a decir de los familiares del agente policial. Las pruebas presentadas y facilitadas al Congreso por la viuda del comisario y su hermana expresan que Villalba solo poseía un sumario administrativo por un procedimiento, pero el caso fue resuelto y no fue hallado culpable.
El desinterés del Senado
“Un mes después de su fallecimiento quise cobrar su pensión y ya habían bloqueado su tarjeta, cuando ni siquiera había presentado su acta de defunción en Asunción. Ahora, con lo poco que tengo debo alimentar diariamente a mis hijos, de los cuales dos se encuentran en etapa escolar y una está en la universidad, pero tiene lupus y se debe costear tanto su tratamiento, como sus medicamentos y desarrollo académico”, contó Raquel.
Versión de la hermana
“Me fui a pedir explicaciones en su momento a Lugo y no me atendió, mucho menos ‘Cachito’”, destacó la mujer, resaltando no solo el desinterés de las autoridades, sino también su falta de solidaridad.
“Me dicen que van a volver a tratar el tema, pero nadie le presta un verdadero interés, siempre nos tienen con esa esperanza, jugando con nuestra necesidad. Nosotros solo estamos luchando por lo que merece mi hermano porque la ley le ampara, en cuanto al ascenso póstumo; los senadores ni siquiera expusieron argumento jurídico alguno para rechazarle este derecho a Raúl y su familia”, refirió Amanda Villalba.