La pulseada política entre los dos sectores se concentra principalmente dentro del Servicio Nacional de Promoción Profesional (SNPP), en donde ambas dirigentes en el marco de las campañas buscan copar la institución con cupos políticos impidiendo el desarrollo normal de las actividades.
Según denuncias, una gran cantidad de funcionarios, simpatizantes de Ovelar, rechazan de manera rotunda el nombramiento de Elisa Fernández, jefa de instructoras del SNPP, quien cuenta con la aprobación de Bacigalupo y logró acceder al cargo llamativamente en plena época electoral.
Al respecto, los simpatizantes de Ovelar, quienes actuarían principalmente como operadores políticos, exigen la destitución de Fernández bajo denuncias de supuestos maltratos laborales. Actualmente, en una denuncia firmada por 20 instructoras adherentes de Ovelar, con el apoyo de la propia directora del SNPP de Concepción, Graciela Trinidad, amenazan con incumplir sus funciones y no impartir los cursos de capacitación dirigidos a la ciudadanía.
Las ronchas entre ambos sectores incluso motivaron a que Julio Pessolani, gerente de Acción Formativa del SNPP, acudiera hasta la institución con la finalidad de corroborar las denuncias.