Por segunda vez en un mes, desde el Palacio de López y esta vez desde la asesoría de seguridad se habría filtrado información sobre el avión iraní, tratando de desviar la atención de la responsabilidad del Gobierno en el descontrol fronterizo. La primera fue la entrega de documentación de Seprelad que aún no había llegado a la Fiscalía y que fue “editada” desde el Gobierno.

Esta tendencia del gobierno de Abdo fue advertida por Emanuele Ottolenghi, miem­bro de la Fundación para la Defensa de las Democracias, quien, entrevistado por Abc Cardinal, dijo ayer que “en lugar de llamar a Washing­ton, Buenos Aires, Montevi­deo, lo pasaron a Abc Color y Telefuturo”, calificando el hecho como una acción irresponsable de un Estado que tiene información reser­vada y la comparte con lógicas mediáticas y no de seguridad.

Vale agregar a lo señalado por Ottolenghi que en realidad el gobierno de Abdo Benítez hizo tal operación –de nuevo– con medios de su confianza para tratar de ocultar, urgente­mente, su alta responsabilidad en la ausencia de controles que permitió que personas identi­ficadas por su potencial acción terrorista se pasearan por Ciu­dad de Este por varios días.

Al mismo tiempo, no puede dejar de visibilizarse la nueva acción comunicacio­nal del Gobierno, en alianza con Abc Color y el grupo del “zar de las fronteras” A.J. Vierci, tratando de apuntar contra el Grupo Cartes.

El experto dijo también durante la entrevista que “el avión llegó a Buenos Aires el 6 de junio. Los primeros 2 días, las autoridades argentinas no sabían que este avión era un problema. Si el Gobierno de Paraguay pasó información reservada, no lo hizo el 16 de mayo, sino tres semanas des­pués”.

Ofrece Ottolenghi un dato más que inquietante durante la entrevista, al mencio­nar que “en el momento en que llega un hombre así, 3 días después del asesinato de un fiscal, un hombre de la Guardia Revolucionaria Iraní, bien identificado, ¿por qué puede llegar a Ciudad del Este y quedarse libremente en territorio paraguayo por 3 días?”.