Inusualmente las homilías son aplaudidas. Ayer lo hizo el pueblo de Pedro Juan Caballero al término de la prédica del párroco Ronaldo Ocampos durante la misa de cuerpo presente oficiada en memoria del intendente José Carlos Acevedo, quien falleció el sábado tras el ataque perpetrado por sicarios del cual fue víctima el pasado martes.
Durante la homilía, el sacerdote exigió que lo ocurrido con el intendente no sea en vano. “Que tu sangre derramada no sea en vano, que sea semilla de esperanza para una sociedad mejor, que sea el inicio de la transformación, de la construcción de una comunidad más pacífica para tu querida ciudad de Pedro Juan Caballero”, dijo párroco de la iglesia Nuestra Señora del Perpetuo Socorro, a donde Acevedo Quevedo asistía de forma muy asidua. “Tantas veces vino él a este lugar y hoy nos toca a nosotros traerlo a él”, dijo Ocampos.
Al oficio religioso asistió gran cantidad de personas, entre pobladores de Pedro Juan Caballero y ciudades aledañas para despedir los restos del jefe comunal de la capital del Amambay.