Tras el sentido paso de la procesión que conduce los restos de Marcelo Pecci frente al estadio Rogelio S. Livieres del club Guaraní del cual era hincha; el homenaje de despedida al fiscal llegó a la iglesia del Colegio San José, donde se encontraba su padre Francisco Pecci, y ante una importante concurrencia se ofreció una misa, antes del traslado al Cementerio de la Recoleta.
“Es una satisfacción para mí porque me deja ese legado de haber sido padre de un hombre honesto, que por trabajar en forma honesta fue barrido, asesinado”, había expresado Francisco Pecci, de 84 años, entre sollozos, el viernes pasado en un homenaje a su hijo frente al Panteón Nacional de los Héroes.
“Es duro para los mayores perder hijos, terrible, es contra la naturaleza, pero en lo que me resta de vida nos queda la satisfacción del deber cumplido con patriotismo por Marcelo Daniel Pecci Albertini”, dijo, y resaltó también que el país necesita de mucha gente como Marcelo para hacer frente al flagelo del crimen organizado y el narcotráfico. “Lo vamos a extrañar mucho”, puntualizó.
