Uno de los más conflic­tivos líderes sindica­les de la Argentina y vicepresidente primero de la Federación Internacional de Trabajadores del Transporte (ITF), Pablo Moyano, está detrás de los gremios camio­neros del Paraguay brindán­doles hace años el asesora­miento para llevar adelante las movilizaciones con cierre de rutas. La línea del modelo Moyano se ha caracterizado siempre por intransigentes piquetes o bloqueos de rutas, por largos periodos, llevando al borde de la ruina econó­mica al vecino país.

El citado Pablo Moyano per­tenece a un clan familiar de fuertes líderes políticos sindicales encabezado por su padre, Hugo Moyano, de clara influencia en la política argentina desde la dictadura militar. Formó con su familia una fuerza sindical que llevó adelante grandes conflictos con piquetes y cierre de rutas contra los gobiernos de turno.

“Nos llamaba la atención que los trabajadores paraguayos no tenían representación sin­dical y en la actualidad viven una situación similar a la de los argentinos con el atrope­llo del gobierno neoliberal”, expresó Pablo Moyano al término de una reunión con camioneros paraguayos.

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Ahora, tras la creación en el 2019 de la Central Obrera y Transporte en Paraguay, presidida por Juan Domingo Villalba, han continuado con esa línea estratégica de los Moyano en Argentina, lo cual se pudo ver con mucha crudeza en las movilizacio­nes y cierre de rutas que lleva­ron adelante tanto en el 2021 y este año con la crisis del com­bustible.

De hecho, tanto padre como hijo son grandes organiza­dores de grupos sindicales de trabajadores. El hijo ha conti­nuado esa misma línea, pero más radical y violenta hacia la izquierda. Finalmente, cabe señalar que la peligrosidad de los Moyano radica en su capa­cidad de aglutinar a grandes masas para luego usarlas en los férreos piquetes hasta conquistar sus objetivos.

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