El presidente de la Asociación Rural del Paraguay (ARP), Pedro Galli, señaló como desatinada la crítica de sectores del Congreso (luguistas) que sostienen que la actividad ganadera es un factor que contribuye a la sequía que azota a zonas del país.
El titular de la ARP considera que no pueden ser responsables cuando son los primeros afectados y aboga por apostar más al uso de energía limpia y renovable.
Primeramente recordó que es bien sabido que se padece con cierta regularidad e intensidad, según las regiones, períodos de sequía. “La ganadería junto con la agricultura son los sectores que se ven en primer lugar afectados debido a la gran dependencia de agua almacenada en el suelo para la producción”, indicó.
Galli defendió las actividades que realizan dentro del sector productivo, porque son los principales actores de conservación de las reservas naturales que están en propiedades privadas. “Contamos con un marco legal existente en Paraguay que es aplicado en las explotaciones agropecuarias”, añadió.
También reiteró el trabajo constante y cotidiano que realizan, previendo cualquier efecto de la seguía. A partir de ahí dijo que tienen una larga lista de acciones que incluyen la adaptación y la aplicación de tecnologías de manejo ambiental, buenas prácticas productivas y ambientales, control del cambio de uso del suelo, selección de razas, rotación de cultivos, etc.). Así como con los pastizales para consumo del ganado son los principales capturadores del CO2.