El nuevo intendente Tomás Olmedo, del Partido Colorado, quien asumió la jefatura comunal luego de 25 años de estar en poder del clan Lanzoni, descubrió un faltante de casi US$ 1 millón, que serían casi G. 7.000 millones, tras el corte administrativo. Durante meses los concejales denunciaron el manejo poco transparente de los fondos públicos por parte del ex intendente liberal Lucas Lanzoni e insistieron con la intervención del Ejecutivo.
La nueva administración se encontró con un déficit presupuestario proyectado al mes de diciembre de G. 1.010 millones. La comuna necesita recaudar unos G. 717 millones para lograr solventar los salarios de los funcionarios.
Una de las máximas deudas que se tiene es con la Ande, de aproximadamente G. 160 millones. También encontraron una deuda de G. 340 millones con una estación de servicio. Tampoco pueden realizar un llamado a créditos, porque no tienen las condiciones financieras; y tienen un atraso de G. 168 millones en aporte patronal con la caja de jubilaciones del personal municipal.