La senadora Georgia Arrúa, del Partido Patria Querida (PPQ), denunció que fue agredida verbalmente por su colega Sixto Pereira, del Frente Guasu (FG), bajo la anuencia del titular del Congreso Nacional, Óscar “Cachito” Salomón, del Partido Colorado (Añetete), a quien acusó de estar totalmente entregado al sector de la izquierda radical y no cumple sus funciones.
Arrúa detalló que la falta de respeto surgió durante el debate del proyecto de ley aprobado en el Senado, el cual plantea elevar las penas contra los invasores de la propiedad privada. El conflicto surgió cuando el parlamentario del FG, durante su intervención, afirmó que sus colegas del PPQ solo se dedican a “cacarear”, hecho que molestó a la legisladora esteña solicitando moción de orden a Salomón.
Ante el pedido realizado, Arrúa recibió como respuesta de Pereira: “Cállate, yo estoy hablando”, para posteriormente ser silenciada. “Yo interrumpí porque se refirió a la bancada de PPQ como los que cacareaban, me dirigí al presidente para que haga cumplir el reglamento y lo llamé a orden, pero como está entregado a ellos, me silenció el micrófono y permitió que Sixto Pereira me falte al respeto sin decir una palabra”, manifestó.
Las declaraciones de Arrúa surgieron ante las expresiones de solidaridad que fueron realizadas por la diputada Rocío Vallejo, perteneciente a su sector político, quien “repudió enérgicamente el maltrato” de Pereira, al igual que las declaraciones del también senador Fidel Zavala contra Desirée Masi, a quien calificó de “Gata Flora”.
“Yo pedí la palabra y cuando me llegó el turno, protesté ante el presidente porque es él quien no cumple su función y no hace cumplir el reglamento interno. Yo no salgo ofendiendo a todos los que defienden ideas distintas. No miento, no soy como otros y tampoco lloro, simplemente hago lo que me corresponde y este impresentable no me afecta (Sixto Pereira)”, sentenció Arrúa.
PRESIDENCIA
Salomón concretó su presidencia por un segundo periodo a raíz de una alianza que realizó con el Frente Guasu, sector que se opone rotundamente a la aprobación de la ley que aumenta las penas a los invasores. Es más, algunos de los integrantes de este sector fueron denunciados por incitadores a invadir propiedades privadas.