El Senado aprobó con modificaciones el proyecto legislativo por el cual se protege a los niños y adolescentes de las influencias de las máquinas tragamonedas. El tratamiento de esta ley se dio luego de que “Tierra de nadie” develara sobre los peligros de este negocio clandestino.
En sesión ordinaria de la Cámara de Senadores, realizada en la jornada de ayer, se aprobó con modificaciones el proyecto de ley “Por el cual se establecen medidas de protección a menores de edad ante las influencias de las máquinas tragamonedas”.
Esta propuesta legislativa fue presentada en el 2019 por los senadores Blas Llano, Gilberto “Tony” Apuril, Fidel Zavala, Fernando Lugo, Patrick Kemper y Silvio Ovelar, pero recién cobró vida luego de que “Tierra de nadie” divulgara sobre las ganancias millonarias que genera este negocio, que se mueve en negro y sobre lo expuestos que están los menores de edad a estas máquinas que están ubicadas en las veredas de todo tipo de negocios.
A través de esta ley se establecen mecanismos para la habilitación y explotación de las máquinas tragamonedas, permitiendo su presencia de forma exclusiva en los casinos y las salas de juegos y se busca, principalmente, proteger a los menores de edad de la ludopatía.
Las municipalidades, en coordinación con la Comisión Nacional de Juegos de Azar (Conajzar), serán los órganos encargados de regular la explotación, y se establece el régimen jurídico por el que deberá funcionar.
La senadora Esperanza Martínez, presidenta de la Comisión de Hacienda, fue quien presentó las modificaciones para este proyecto que, en total consta de nueve artículos, y al que se le adicionó un nuevo capítulo.
El artículo sexto fue el que sufrió modificaciones. El proyecto, primeramente, establecía que las municipalidades realizarían una concesión a una empresa para la explotación de juegos electrónicos y de azar.
“Creemos que es mejor no hablar de concesiones sino de permisos de explotación de juegos electrónicos y de azar, que serán otorgados por las municipalidades, de tal manera a que no existan oligopolios o monopolios en las adjudicaciones y que pueda haber una suerte de competencia”, expresó la legisladora.
Respecto al nuevo capítulo de la propuesta, señaló que hace referencia a la “trazabilidad y el monitoreo”. Según este nuevo ítem, las máquinas tragamonedas deberán tener un sistema de detección de menores de edad, de alarma ante la ludopatía, y de identificación de operaciones inusuales.
Además de esto, las operaciones de apuesta y pago de premios deberán estar identificados con los siguientes datos: documento de identidad, número de máquina único e irrepetible, número de transacción, lugar de apuesta, operador, municipio, hora, minuto y segundo de la apuesta y el monto apostado.
La senadora afirmó que este sistema de trazabilidad ayudará a transparentar los ingresos que generen estas máquinas y permitirá mejorar la recaudación del fisco. El estudio pasa ahora al ámbito de la Cámara de Diputados.