El senador liberal Blas Llano manifestó que resulta un despropósito que el director paraguayo de la Itaipú Bina­cional, Manuel Cáceres, pre­sente una acción de incons­titucionalidad ante la Corte Suprema de Justicia para evi­tar el acceso a información pública de la entidad a través de la Ley de Transparencia. Señaló que de esta manera Cáceres echa por tierra las promesas que realizó cuando buscó su acuerdo constitu­cional en el Senado.

“Para mí es un despropósito que una persona como el director de Itaipú haga esto. Él fue designado por el Poder Ejecutivo, pero tuvo acuerdo del Senado y recuerdo que cuando compareció ante nuestra bancada, se com­prometió a ser lo más trans­parente y abierto posible”, expresó el parlamentario, en entrevista con periodistas.

Llano agregó que en dicha ocasión, Cáceres prometió que las puertas de la bina­cional iban a estar siempre abiertas, no solo a los reque­rimientos que pueda hacer el Congreso, basado en la facul­tad constitucional que tiene de pedir informes, interpe­lar a cualquier funcionario o crear comisiones de inves­tigación, sino que también abierto a medios de comu­nicación y, en específico, al periodismo de investigación en curso sobre un tema que atañe a la Itaipú.

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“También a organismos de control natural que tiene el Estado paraguayo como la Contraloría General de la República, y en la eventua­lidad de que haya la posible comisión de un hecho puni­ble, la intervención de la Fis­calía”, agregó.

En ese orden, el congresista mencionó que el actuar del director de la Itaipú echa por tierra todas esas prome­sas “que se hacen cuando uno necesita el acuerdo consti­tucional del Senado. Por eso tuve mis reservas yo en su momento. Lamentablemente, esas dudas que teníamos acerca de la palabra empe­ñada por el director caen en saco roto”, fustigó.

Llano también se refirió sobre el constante discurso de los titulares de las entidades binacionales de que no pue­den revelar información por­que atentarían a los tratados firmados con los respectivos países.

“No pueden estar perma­nentemente jugándose en un tratado. Es cierto, está por encima de una ley, pero clara­mente por debajo de la Cons­titución. Los tratados, los acuerdos y convenios interna­cionales entre Estados están por debajo de la Constitución Nacional, según la pirámide de Kelsen”, expresó.

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