La fiscala general del Estado, Sandra Quiñónez, indicó ayer que la investigación sobre el secuestro y asesi­nato del joven esteño Jorge Ríos está aún muy incipiente y que sería muy irrespon­sable de su parte descar­tar cualquier hipótesis, al ser consultada si fue ase­sinado por narcotrafican­tes. Expresó también que se necesita de más tecnolo­gía y recursos humanos para dar frente a estas problemá­ticas de seguridad.

La titular del Ministerio Público fue consultada sobre el punto, luego de la reunión reservada que mantuvo con el Senado, teniendo en cuenta que el propio titular de la Cámara Alta y del Con­greso, Óscar Salomón, se refi­rió a supuestas informaciones que manejan algunos sena­dores, que no identificó, pero que tendrían aparentes vín­culos con vecinos de la zona norte, donde ocurrió el hecho. El legislador indicó que algu­nos vecinos hicieron comen­tarios de que el trasfondo del secuestro y asesinato del joven tendría más relación con el narcotráfico y no tanto con grupos armados identifi­cados como ACA o EPP. “Hay senadores que tienen contac­tos en la zona y hablaron con los pobladores y ellos están muy preocupados”, indicó.

PRUEBAS

Inmediatamente, Carlos Aguilar, tío del joven asesi­nado, desafió al titular del Congreso a que busque a la persona que dijo que es un ajuste de cuentas y que com­pruebe sus dichos.

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“Si alguien quiere decir que es cuestión de narcotráfico está bien, pero que pruebe. Le desafío que use su poder para que él nos diga a nosotros qué pasó. Yo solo tengo a un sobrino que enterré recién”, expresó en comunicación con radio Ñandutí.

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