El senador liberal Fernando Silva Facetti comenzó señalando la preocupación que les causa el sesgo autoritario que utilizan “para justificar el resguardo de un supuesto interés general, coartando el goce y ejercicio de derechos. Concibiendo de mala manera que con la disminución de esos derechos se logrará el bienestar general, cuando es exactamente lo contrario”, indicó.
Indicó que esta presentación hace un reconocimiento tácito de la ilegalidad de muchas de las medidas ordenadas por el Ejecutivo, y toleradas por la sociedad; para la preparación del Estado en la lucha contra el covid-19 en una primera fase, y en la contención de su propagación en una segunda. “Ante la mala gestión de los recursos extraordinarios, tanto legales como económicos que le fueron dados, sobre cuyo ejercicio y administración existen fuertes sospechas de corrupción”, comentó.
Señaló que el mismo atenta contra declaraciones fundamentales, derechos y garantías constitucionales; al otorgar facultades extraordinarias al Poder Ejecutivo para la restricción del ejercicio de libertades consagradas en la Constitución.
“Así como la peligrosa suma de poder público, en abierta violación al artículo 3º de la Carta Magna, ya que el 238 Nº 16 de nuestra Constitución fija que las atribuciones del presidente de la República serán limitadas a lo contenido en la propia Constitución. Por tanto, el Congreso de la Nación no puede otorgar al Ejecutivo la facultad legal para restringir derechos y libertades, salvo la expresa excepción señalada en el artículo 288 de la Constitución Nacional, que habla de la declaración del Estado de Excepción”, precisó.