Luego de 15 días de su aprobación, el presidente de la Cámara de Senadores, Óscar “Cachito” Salomón, finalmente remitió a la Cámara de Diputados el proyecto de ley que autoriza el recorte de los polémicos aumentos salariales, que se había dispuesto a favor de funcionarios de la Cámara Alta. Ahora, la decisión está en manos de la Cámara Baja realizar los recortes a los “aumentazos” que Salomón había otorgado en plena pandemia de covid-19, por un valor de G. 12 mil millones.
La normativa propuesta por varios legisladores colorados y de la oposición planteaba el recorte de todos los aumentos otorgados por la actual administración de la Cámara Alta, pero durante su tratamiento el pasado 8 de abril se introdujeron modificaciones, con las que finalmente se planteó el recorte de los aumentos para aquellos funcionarios cuyos sueldos sean mayores a G. 5.400.000.
Conforme al proyecto que ahora tiene media sanción, se busca lograr un recorte de G. 8.067 millones; que a su vez plantean redireccionar esos recursos para asistir a la Ley de Emergencia Sanitaria. También se realizaron recortes de gastos de representación y aguinaldos.
DEMORA EN EL ENVÍO
Si bien este proyecto de ley fue aprobado hace dos semanas atrás por la Cámara Alta. Algunos funcionarios administrativos alegaron que la demora para remitir el proyecto de ley se debía a “un trabajo minucioso” de control, ya que figuran en la lista de beneficiarios unos 400 funcionarios.
La medida administrativa que otorgó el aumento por valor de G. 12.000 millones fue bajo la presidencia del colorado Óscar Salomón, quien intentó justificar, y logró mantener algunos de los aumentos, ya que no prosperó el proyecto original que planteaba un recorte total. En la lista de los beneficiarios aparecen inclusive varios directores con altos salarios, que pasaron a ser funcionarios de confianza de Salomón.
CRÍTICA DE LLANO
Cabe recordar que, durante el tratamiento de este proyecto de ley, el pasado jueves 8 de abril el senador Blas Llano acusó al titular del Senado, Óscar Salomón, “de extorsionarlo y chantajearlo” para desistir de la ley que buscaba recortar todos los aumentos salariales para funcionarios del Congreso Nacional y el Senado. El líder liberal salió al paso de las acusaciones en contra de su administración por supuestos incrementos salariales.
“No es manera de plantear, menos llamar a un colega a extorsionar o chantajear porque o si no vamos a enquilombar, ejapo la ejaposéa, no me vas a correr con vaina”, le recriminó. Además, dijo que “se quiere establecer una casta de privilegiados en el sector público” con los altos salarios.