El ministro de Educación y Ciencias (MEC), Eduardo Petta, en una estrategia comunicacional para dar a conocer cómo, hipotéticamente, sería el mecanismo para evitar el contagio del covid-19 entre los estudiantes, participó ayer en el simulacro del #RetornoSeguroAClasesPresenciales. En su primera visita al tradicional colegio Ysaty de Asunción, Petta se evidenció.
En un nuevo pero siempre bochornoso episodio, esta vez transmitido en vivo, el propio jefe de Educación, Petta San Martín, se saltó la fila, incumplió el protocolo sanitario, dando así el ejemplo de cómo exponerse al coronavirus en la escuela. Los maestros lo corrigieron en vivo y en directo.
“Por qué lo que tanto me persiguen”, dijo, ofuscado, el ministro, mientras que en el video se observa que todos los docentes estaban participando del operativo para que niños y adolescentes no se contagien. El ministro dio el ejemplo de lo que no debe hacerse.
La propia directiva del colegio, micrófono en mano, le dijo al ministro: “Debe respetar la fila”, y Petta respondió, también micrófono en mano: “Yo al baño nomás me voy”. El ministro, avergonzado, intentó recriminar a los docentes. El maestro instructor le indicó al inicio que si quiere ir al baño, debe levantar la mano y pedir permiso al maestro.
“Alumnito Eduardito, vamos a aguardar en la fila. De a uno, por favor, en la fila”, indicó el maestro al ministro, mientras este se adelantaba en fila a todos los demás maestros que, con señaléticas, colores e indicaciones, estaban intentando enseñar a los alumnos. “Ahí no es”, le corrigieron las docentes conscientes del simulacro.
Si bien la transmisión y el simulacro de retorno estaban muy bien preparados y dispuestos por parte de los técnicos y profesores del MEC, el ministro que lideraba el operativo no tardó en desoír las indicaciones del profesor que explicaba para todo el alumnado nacional.
LAVADO DE MANOS CON GUANTES
Pero esta no es la primera vez que Petta evidencia no conocer el protocolo sanitario.
En una imagen publicada por el propio MEC, anteriormente, se lo vio al ministro mientras hacía uso, según él correctamente, del lavamanos. Petta dejó anonadados a los presentes, entre profesores y padres de familia, mientras se lavaba las manos con los guantes puestos.
La equivocada forma de lavarse las manos fue la del propio ministro de Educación, quien demostró una vez más lo que no se debe hacer. El lavado de mano es un hábito de todos los días que los seres humanos están obligados a adoptar y sobre todo en esta pandemia.