El ministro secretario ejecutivo de la Secretaría Nacional de Inteligencia, Esteban Aquino Bernal, manifestó en una conversación Mano a Mano con La Nación, sobre la importancia de la cartera a su cargo que está trabajando plenamente en la identificación precisa y oportuna para neutralizar amenazas de carácter doméstico y global. En ese sentido, indicó que la SNI trabaja en un nivel altamente técnico para generar productos para su empleo en la toma de decisiones de los niveles de conducción del país. Igualmente, describió los principales aspectos que marcarán la agenda 2021 en la institución.
–¿Por qué la Secretaría de Inteligencia es importante para la gestión del Gobierno?
–La SNI es un órgano de inteligencia estratégica y su ámbito de gerenciamiento es el nivel estratégico de la conducción nacional. Todo Estado debe contar con un órgano estratégico de inteligencia capaz de delinear escenarios futuros y proponer posibles alternativas para las decisiones que debe asumir el Ejecutivo en el ámbito nacional e internacional y, a la vez, que éste posea la capacidad de alertar anticipadamente cuando la relación de determinados acontecimientos pueda eventualmente comprometer los objetivos o intereses nacionales vinculados al desarrollo, a la seguridad nacional, a la estabilidad de su régimen democrático o a la seguridad y estabilidad del Gobierno.
–¿Cuál es la función que realiza la institución en carácter investigativo?
–Como laboratorio de análisis, la SNI recolecta, analiza y procesa información útil y oportuna para neutralizar amenazas de carácter doméstico y global. Trabajamos en un nivel altamente técnico para generar productos para su empleo en la toma de decisiones de los niveles de conducción del país. Desde la primera reunión del Consejo de Seguridad Nacional, hemos marcado presencia y hemos tenido el apoyo irrestricto del señor presidente de la República, quien a diario nos da el aliento, la fuerza y monitorea permanentemente nuestro accionar. Desarrollamos un trabajo con un notable equipo humano, con el condimento del patriotismo e integridad.
–¿Cómo la pandemia del coronavirus afectó las dinámicas de Inteligencia?
–Nuestro esfuerzo está enmarcado estrictamente en la observancia de la Constitución Nacional y de las leyes. En ese orden de cosas, la pandemia afectó a todo el orbe. La SNI no sólo ha generado una alerta temprana de lo que se venía, de su naturaleza como amenaza global y sus demoledoras consecuencias, sino como miembro pleno del Centro de Coordinación Interinstitucional (CCI), de apoyo al Ministerio de Salud Pública y Bienestar Social (MSPyBS), ha encarado un trabajo sostenido hasta hoy de manera incansable ante el covid-19.
–En ese sentido ¿cómo ha colabora la SNI en la elaboración de estrategias contra la pandemia?
–Hemos participado activamente en el diseño estratégico de las mitigaciones de los albergues, de la asistencia sistemática e incluso como un interlocutor válido para la ciudadanía desde nuestras redes sociales que se ha convertido en un canal de traslado de información veraz y oportuna, conforme a las exigencias mismas de la misión y de la situación que nos tocó experimentar como país. Nuestro trabajo está enfocado con un alto criterio de servicio al ciudadano, donde se priorizan las necesidades y las carencias.
–¿Cuáles fueron los principales logros y obstáculos de la SNI este 2020?
–La ley nos impide contar lo que hacemos, las restricciones están en el texto de la norma. Pero podemos asegurarles que estamos trabajando las 24 horas del día para producir inteligencia, información que pueda ser oportuna y contributiva para los niveles de decisión. De hecho, creemos que estamos haciendo un trabajo que goza de la confianza de la ciudadanía.
La SNI posee un reconocimiento del Departamento de Estado de los Estados Unidos en su “Informe Nacional sobre Terrorismo 2019: Paraguay”, además de otros países. Nosotros asumimos eso como un reconocimiento al esfuerzo de todo el equipo institucional. Es decir, lo tomamos como una señal, como una muestra de que estamos haciendo bien las cosas.
–¿Hay trabajos visibles que se puedan destacar?
–Hemos logrado instalar el Consejo Nacional de Inteligencia (CNI), integrado por varios ministerios. Pero como una institución estatal, la SNI posee las limitaciones que son propias, como el escaso presupuesto, un factor que, sin embargo, bajo ningún motivo ha sido fundamento para que no hagamos el trabajo conforme las altas exigencias y con un alto sentido de responsabilidad de todos. Tenemos acuerdos de cooperación con agencias extranjeras que poseen las mismas amenazas que nuestro país.
–¿Cuáles serían los puntos cruciales para que el país trabaje con inteligencia estratégica este 2021?
–Serían el fortalecimiento del Sistema Nacional de Inteligencia (Sinai); facilitar el intercambio de información entre todas las instituciones estatales, entre estas y otras entidades que la conducción político-estratégica determine necesaria. Consolidar la cooperación internacional y, a la vez, establecer nuevas alianzas estratégicas con agencias de países aliados. Estos puntos adquieren una especial relevancia tomando en consideración que muchas de las amenazas que los países democráticos deben enfrentar son de alcance internacional. Trabajamos desde el silencio y fundados en criterios que sólo apuntan a la eficiencia y en absoluto beneficio de nuestros conciudadanos. Con esos conceptos, entendemos que encararemos el 2021 con un mayor compromiso.