La Comisión Especial de Supervisión y Control de Compras Covid-19 confirmó a través de un con­tundente informe que el clan Ferreira y sus empre­sas Imedic SA y Eurotec SA intentaron engañar al Minis­terio de Salud con la venta de mascarillas que debían ser de uso médico, pero se comprobó fehacientemente que no lo eran, por lo tanto, se confirma con el citado documento que los Ferreira quisieron estafar al Estado paraguayo, pero la Fiscalía se sigue negando a formular la imputación por el presente caso y pone excusas poco creíbles para no imputar.

Según el documento, se evi­dencia que las mascarillas quirúrgicas y las mascarillas N95 que debían proveer Insu­mos Médicos y Eurotec SA debían ser para uso médico, sin embargo, no lo eran como lo constató la Comisión Especial. También se pudo comprobar que se alteró la descripción de las especifi­caciones de origen, donde se confirma que es un engaño relevante, ya que se hubiese realizado la contraprestación (pago del precio) solamente si los productos estaban acor­des a las especificaciones téc­nicas requeridas.

Igualmente, se menciona en la conclusión del informe que la conducta de los autores fue acabada y se pudo evitar que dichos insumos ingresen al Ministerio de Salud gracias al control realizado primera­mente en el aeropuerto Sil­vio Pettirossi, donde se pudo constatar el estado original de los productos que se pre­tendían ingresar al parque sanitario sin reunir las espe­cificaciones técnicas reque­ridas para su uso.

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DENUNCIA

La denuncia presentada por el ministro de Salud, Julio Mazzoleni, relataba hechos que involucraban a las fir­mas Insumos Médicos SA y Eurotec SA, en el marco de la contratación vía excepción N° 36/2020, “Adquisición urgente de insumos y camas para covid-19 convocadas por el MSPyBS”.

Las circunstancias relatadas en ella se subsumen clara­mente en el hecho punible de estafa en grado de tentativa acabada, y en hechos puni­bles de índole marcaria. La denuncia se basaba principal­mente en el informe presen­tado por la Comisión Especial de Supervisión y Control de Compras Covid-19, que rea­lizó conclusiones a partir de constataciones “in situ”.

Los puntos principales de la denuncia trata sobre la adulteración, manipulación y alteración, con evidente intención de engañar acerca de las verdaderas caracte­rísticas y origen de las mas­carillas KN95, importadas tanto por Eurotec SA como por Insumos Médicos SA en el marco de los contratos de referencia.

Con base en todos los elemen­tos que ya tienen en su poder los fiscales que investigan el caso, los mismos siguen sin formular la imputación con­tra Justo Ferreira y sus hijos. Sin embargo, la Fiscalía pone argumentos pocos creíbles para trabar el caso, mencio­nando que se solicitó infor­mes a la Facultad de Cien­cias Químicas de la UNA para hacer una comparación en cuanto a las normas técnicas de fabricación de esas masca­rillas. Este tipo de pedido solo hace que se congele el caso debido a que se tiene sobra­dos elementos para imputar por tentativa de estafa. Este hecho debe llamar la atención a la fiscala general del Estado, Sandra Quiñónez, quien si no toma una determinación más concreta podría ser cómplice del clan Ferreira.

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