El ministro del Inte­rior, Euclides Ace­vedo, indicó ayer que la actuación de los agentes policiales en el caso del niño de 6 años baleado entre San Lorenzo y Luque fue por falta de idoneidad de los uniformados. “Acá hay dos irresponsabilidades, del padre que lleva a la cria­tura y encima se esconde y huye, y una falta de idonei­dad profesional del policía que debería disparar a la rueda, pero fue a otro lado su bala”, manifestó al intentar justificar el procedimiento.

El secretario de Estado agregó que respalda el trabajo de los policías competentes y anunció que aquellos que no responden conveniente­mente a la tarea como debe ser serán sancionados. “Yo apoyo a los policías com­petentes, pero a los que no vamos a castigarlos también”, afirmó ayer al llegar al Hos­pital de Trauma, donde fue a visitar al menor baleado.

El procedimiento se regis­tró el sábado 30 alrededor de las 19:00. El conductor y padre del niño baleado, Ricardo Riquelme, evadió el puesto policial por temor a una multa o el pago de una coima –según alegó–, por lo cual fue perseguido por los uniformados hasta la zona de Luque (unos 8 kilóme­tros), lugar donde se regis­traron los disparos.

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Los efectivos policiales Juan Amarilla, con más de 10 años de servicio, y el suboficial Derlis Sanabria, con dos años de actividad, fueron imputa­dos por el Ministerio Público por tentativa de homicidio, omisión de auxilio y lesión corporal en el ejercicio de sus funciones. Cuentan con prisión domiciliaria.

La Policía Nacional, por su parte, se valió de un comunicado para expresar su solida­ridad con la familia del niño y lamentó el suceso. Además, se pone a disposición del Minis­terio Público a fin de colabo­rar para el esclarecimiento del repudiable hecho. “Ante el penoso suceso en el cual resultara herido un menor de 6 años de edad durante una persecución policial, el Comando Institucional lamenta profundamente lo sucedido y expresa su solida­ridad con la familia afectada”, señala el manifiesto.

DURA CRÍTICA

Tras lo ocurrido, el abogado Jorge Vasconsellos insistió ayer en que son ilegales los operativos policiales con las barreras en las calles y cues­tionó el trabajo desplegado por la Policía en la noche del sábado 30 en San Lorenzo. El operativo terminó con la persecución y disparos de armas de fuego a un vehí­culo en el que viajaba toda una familia hasta Luque, en la que resultó gravemente herido un niño de tan solo seis años de edad.

“No hay ley alguna que ampare estos procedimien­tos irregulares e ilegales, solo la cobardía intelectual y moral de un sistema judi­cial que representa los inte­reses de las autoridades de turno, olvidándose del valor supremo de la justicia y la equidad. Pero, desde luego, todo intento de razonar con los defensores de estos abu­sos naufraga porque el pro­blema, más que jurídico, es ideológico”, dijo.

A través de sus redes socia­les, el letrado señaló que no es algo nuevo escuchar este tipo de casos y recordó el de la niña baleada por agentes de la Senad en Nueva Ita­lia así como el transporte escolar baleado en Areguá el año pasado.

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