El presidente de la Unión de Tabacale­ras del Paraguay, José Ortiz, calificó de “algo tirado de los pelos” y de “un opor­tunismo político” el plantea­miento hecho por los parti­dos Frente Guasu y Partido Democrático Progresista (PDP) de elevar impuestos en este momento de coyun­tura de crisis sanitaria gene­rada por la COVID-19. Agregó que la propuesta, al final, ter­minará por impulsar la infor­malidad en el país.

“Es algo tirado de los pelos y muestra claramente el opor­tunismo político, sin ningún tipo de análisis coherente. Es una vergüenza lo que plantea esta gente. Lo que se plantea en el tema de impuestos es casi inmoral en este momento”, dijo, en contacto ayer con la radio Universo 970 AM. Ortiz coincide así con la Federación de Producción, la Industria y el Comercio (Feprinco), la Unión Industrial Paraguaya (UIP) y referentes políti­cos, quienes también hablan de que no es el momento de hablar de un incremento de los tributos.

“Cuando uno plantea un impuesto y dice, vamos a recaudar tanto, tenemos que ver dónde está el dinero, y ese dinero que ellos plantean no existe. Hay gente que habla de que con el tabaco se recauda­rán 600 millones de dólares; yo creo que el FG comentó que serán 157 millones de dólares. ¿Les pregunto: dónde está ese dinero?”, subrayó.

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Valoró, no obstante, la pos­tura del presidente Mario Abdo. “El presidente de la República dio un mensaje cla­rísimo; por suerte marcó muy bien la cancha y se colgó de algo muy sabio que dijo el pre­sidente de Uruguay”, afirmó el empresario.

INFORMALIDAD

Resaltó que mediante la informalidad se dejarán de pagar varios beneficios, como el Impuesto a la Renta Perso­nal (IRP), así como la asisten­cia brindada por el Instituto de Previsión Social (IPS), destinada a los trabajadores.

“El sector está pagando 140 millones de dólares en impuestos; el sector gana mucho menos dinero que el impuesto que paga y, ¿dónde está la otra plata?, no existe, entonces qué van a decir y qué colocarán. Dirán, seño­res dueños de fábricas clan­destinas o falsificadores, ahí tiene 140 millones de dólares para dejar de pagar, si ustedes colocan una fábrica clandes­tina, que ocupará el mercado, tendremos 150 millones de dólares dentro del mercado informal y no se pagará IPS, ni Impuesto a la Renta; los empleados perderán de esta forma el seguro médico. Esto, en verdad, terminará siendo una expulsión de la formali­dad a la informalidad; es tan irresponsable lo que plan­tean, es una vergüenza”, sen­tenció.

TABACO Y TABESA

Ortiz argumentó que el sector del tabaco es el que actualmente sufrió la suba del establecimiento de mayores impuestos. Exhortó también a todos los políti­cos, antes de impulsar la pro­puesta, a observar la coyuntura global y regional ante el conflicto por la enfermedad de la COVID-19.

“En los últimos 10 años, el último impuesto que aumentó en Paraguay fue el sector del consumo del tabaco; creo que la vez pasada había subido un poco a las gaseosas y las cerve­zas, pero mínimamente”, dijo, y alertó que “hay otras empre­sas, y las pymes, que no están resistiendo, nosotros estamos ahora por los 50.000 despidos formales”, comentó.

Recalcó que la firma Tabesa, que pese a la crisis sanitaria, continúa con el pago normal a sus trabajadores, y que se trata de una de las empresas con más fuentes de empleos. “Cómo en medio de esta pan­demia intentan impulsar una propuesta como esta. Voy a hablar solamente de Tabesa, de la distribuidora Palermo y del sector agrícola: nosotros tenemos actualmente 1.800 empleos directos, sin contar con los 2.500 productores de tabaco. Tenemos traba­jando 200 personas máximo en este momento para cum­plir exportaciones, y esta­mos pagando salario com­pleto a 1.800 personas, con el fin de hacer un gran sacri­ficio para resguardar todos los empleos”, dijo.

Señaló también que el proto­colo de aislamiento ejercido por el Gobierno no durará mucho tiempo, y no será a raíz de la inconsciencia de la gente, sino más bien por la necesidad.­

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