La Cámara de Senadores resolvió ayer tratar en 15 días un proyecto de ley que modifica varios artículos de la Ley Penitenciaria 210/1970, en el que se plantea un régimen penitenciario más severo, según la tipología del delito. En el caso particular de violación y/o asesinato de menores de edad, se pretende que aquellos prisioneros que estén por estas causan sean sometidos a trabajo obligatorio dentro de las penitenciarías a fin de que ellos mismos se costeen su manutención dentro de las cárceles.
El proyectista es el senador liberal Enrique Salyn Buzarquis, quien indicó que el Estado no tiene la obligación de mantener a criminales proveyéndoles alimentación y demás elementos de manutención y sustento personal, pero que los mismos sí tienen derecho a trabajar durante el tiempo que permanezcan recluidos. Al respecto, señaló que le gustaría llamar a este proyecto de ley Naidelin, en honor a la niña de 7 años secuestrada y asesinada en Minga Guazú.
Asimismo, señaló que el objetivo es establecer un régimen penitenciario diferenciado, que obligue a los recluidos a trabajar para conseguir sus alimentos, considerando que esto sería beneficioso para el sistema penal y judicial, ya que el interno se mantendrá activo, ocupará su mente y aprenderá oficios.
“Planteo un régimen penitenciario según la tipología del delito, en este caso abusadores que violaron y mataron a un niño, niña, adolescente, yo creo que están en la escala delicuencial más alta y más dura. Creo que ellos deberían pagarse su manutención”, expresó el legislador.