En ocasión de las imputaciones contra referentes de Honor Colorado, como el caso del senador Javier Zacarías, hubo una rápida actuación para conocer detalles referidos a declaraciones juradas. Sin embargo, ahora que la propia Contraloría General de la República expresa evidencias de falsedades en la información suministrada por Eduardo Petta y otros ministros, el titular de la Secretaría Anticorrupción, René Fernández, guarda un obstinado silencio, señaló ayer el abogado Eduardo González, apoderado de la ANR. Este recordó que el mismo no tuvo reparos en acusar por lo mismo a Zacarías.
Para Eduardo González, referente de Honor Colorado, el PDP está cumpliendo un triste papel de “blanqueador” del lado más sospechosamente oscuro del Gobierno. De hecho –agregó– se habla de contratos de consultorías incluso de referentes de este sector en el Gobierno, aparte de los ministerios que ya ocupan.
Similar actitud se ha observado también en el referente del PDP designado para “investigar” a Petropar, cuya titular, Patricia Samudio, navega de escándalo en escándalo. En este caso no tuvo ninguna observación importante por parte del entonces encargado de auditarlo, Carlos Arregui. “Arregui fue el mismo fiscal que cajoneó el expediente de Filizzola”, dijo González.
En estos días, la total ausencia de reacción de la Secretaría Anticorrupción del Gobierno coincide con la fuerte reacción de la propia líder partidaria, Desirée Masi, que lejos de posicionarse en la “lucha contra la corrupción”, como actuaba contra sus enemigos políticos, ha saltado poco menos que a amenazar a los que intentan investigar a altos funcionarios del gobierno actual.