La militarización de la seguridad interna genera un debate dentro de la sociedad debido a la propuesta del Poder Ejecutivo de modificar la misión de las Fuerzas Armadas establecida en la Constitución Nacional. El general (R) Darío Cáceres explicó que por doctrina constitucional no se podría.
“No es lo que corresponde, deberían de hacerse algunas actividades muy específicas de control, pero como función no correspondería porque las FFAA tienen un rol doctrinario constitucional”, explicó a La Nación.
Indicó que las funciones de las fuerzas militares son defender al país de agresión internacional o interna, como es el caso de la Fuerza de Tarea Conjunta, encargada de combatir al grupo criminal autodenominado Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP). “Ahí sí corresponde porque es una alteración interna del orden de una zona”, afirmó.
Por otro lado, dijo que los entrenamientos de los militares son diferentes y, por lo tanto, no pueden servir para una actividad de orden público y que cada institución se prepara de acuerdo al fin que buscan cumplir. “El que quiere ser policía va a la Academia de Policía y el que quiere ser militar, a la Academia Militar”.
También considera oportuno dotar de mayor apoyo logístico a la Policía Nacional. “Podrían aumentar el equipamiento y la parte logística para dotarle mejor a la Policía; incluso las Fuerzas Armadas no tienen la dotación que corresponde y como debería para cumplir su misión”, aseguró.
No obstante, acompaña la idea de destinar mejor las funciones, “tienen que reacondicionar a su personal, muchos personales cumplen funciones que no son de orden público, se debe de destinar a lo que corresponde. Por ejemplo, hay guardias que cubren bancos y shoppings, empresas que deberían de formar su propio personal de seguridad”, añadió.
Asegura que modificándose la función de las fuerzas militares, se “desvirtuaría la misión, la mística y el sentido de pertenencia que tienen las Fuerzas Armadas”. Lo que recomienda es fortalecer la reserva de las FFAA, “tenemos que tener una reserva activa”, agregó.
FUERZA OCIOSA
En el mismo sentido, el Gral. Carlos Liseras, ex presidente de la Suprema Corte de Justicia Militar, cree que “la amenaza no amerita que se emplee a las FFAA por la defensa nacional”. Además, aseguró que las mismas no son una fuerza ociosa, “están cumpliendo tareas”.
Considera que “el empleo militar como policía no es lo mejor, la doctrina ni la historia no permiten”. Pero en el caso de que el presidente de la República considere que la Policía Nacional fue sobrepasada en su función, “entonces se deben agotar todos los recursos para darle a la institución que hace la seguridad interna la posibilidad de hacer una reingeniería en sus filas y ser empleadas antes de utilizar a las Fuerzas Armadas”, dijo.
POR TIEMPO LIMITADO
Para el ex ministro de la Senad Cnel. (R) Hugo Vera, es innecesario cambiar los roles de ambas instituciones. No obstante, cree que “no se debe estar ajeno a que las Fuerzas Armadas en algún momento y en tiempo limitado puedan apoyar la seguridad interna del país”.
“Estoy de acuerdo con la evolución de la crisis y el momento político para prever la utilización parcial de los elementos de las Fuerzas Armadas, bajo un comando. Se deben manejar los estadios de seguridad y, de acuerdo al ahondamiento, se puede pensar usarlas para seguridad, pero por tiempo limitado”, indicó.
El presidente de la República, Mario Abdo Benítez, anunció que el proyecto de enmienda para utilizar a las Fuerzas Armadas para la lucha contra el crimen organizado sería presentado esta semana al Congreso Nacional para que sea debatido y analizado desde diferentes puntos. Desde el Ministerio del Interior consideraron a las fuerzas militares como una fuerza ociosa que debe de ser destinada a apoyar a la Policía.