La diputada Kattya González, en su defensa, aseguró ayer que no incurrió en ningún tráfico de influencias en el caso de la arenera Villa Elisa, cuyos directivos la denunciaron en ese carácter. Sostiene que lo que hizo fue acompañar a un grupo de vecinos organizados, pero que después de asumir como diputada ya no firmó ningún pedido.
“Yo solo acompañé a un grupo de vecinos; yo no tengo ningún tipo de injerencia, ninguna posibilidad de influir. Esta empresa no tenía licencia de impacto ambiental y ese fue el motivo por el cual se le canceló porque estaba funcionando sin licencia de impacto ambiental, gravitando en un barrio histórico de Villa Elisa, y donde han destruido todas las casas; este grupo de vecinos ha decidido encarar una lucha”, manifestó la diputada del Partido Encuentro Nacional (PEN).
Agregó además que en el barrio hay dos escuelas, por lo tanto la empresa representa un peligro para los pobladores del lugar. “Se han producido dos accidentes de tránsito, inclusive con derivación fatal, a raíz justamente de la intervención de los camiones de esta arenera. ¿Qué teníamos que hacer nosotros, dejar que sigan matando a nuestros niños?”, dijo.