ENVIADOS ESPECIALES: EQUIPO PERIODÍSTICO DE GRUPO NACIÓN. REDACCIÓN: SECCIÓN POLÍTICA DE LA NACIÓN.
Como consecuencia del amotinamiento ocurrido el domingo último cerca del mediodía en la Penitenciaría Nacional de San Pedro, se supo que cuatro internos condenados en el penal por homicidio y tráfico de drogas residían en una “granja VIP” ubicada detrás mismo del reclusorio sin ningún tipo de seguridad. Es más, familiares de algunos de los internos también vivían en la casa.
Los privilegiados fueron identificados como Víctor Brítez Aranda, condenado a 26 años por tráfico de drogas; el otro es Ángel Tranquilino Giménez, con 21 años de condena también por tráfico de drogas; el tercero es Ramón Benítez, con 15 años de condena por homicidio y quien se hacía pasar por médico naturalista en la vivienda, y el último es Gustavo Paoli, condenado a 9 años de cárcel.
De acuerdo con las informaciones recabadas en el lugar, la vivienda tuvo una inversión de G. 100 millones porque cada uno de los reclusos contaba con habitaciones separadas y con todas las comodidades, como aire acondicionado, televisores led, sofás, somiers, heladeras, hornos eléctricos. Además, no contaban con ningún equipo de seguridad, por lo que los internos podían salir en cualquier momento y a cualquier hora sin ningún inconveniente.
Con los internos también residían otras personas como Isabel Brítez Aranda (45 años), una menor de 11 años y dos jóvenes: Arnaldo Brítez, de 23 años, estudiante de medicina, y José Luis Morel, de 21 años. Todos son parientes del recluso Brítez Aranda. También estaba en el sitio Lourdes Margarita Medina Galeano (35 años), pareja de Paoli.
El equipo periodístico de GEN y la Radio 970 AM realizó las investigaciones correspondientes y salió a la luz que Brítez Aranda tenía en su poder una copia de orden judicial firmada por el juez de ejecución del penal, Néstor Arévalo, en que daba la orden de que este interno sea trasladado a la “granja VIP”, que aún no está inhabilitada, según el Ministerio de Justicia y Trabajo. Solo Brítez Aranda contaba con la orden.
MOTÍN EN LA PENITENCIARÍA
Esta vivienda salió a la luz recién después de haberse registrado un motín en el interior de la penitenciaría, que dejó como resultado 10 muertos; 5 decapitados, 3 calcinados y 2 abatidos, además de varios heridos durante la jornada del domingo de tarde. El enfrentamiento lo protagonizaron miembros del Primer Comando Capital (PCC) y el Clan Rotela, que se llevó la peor parte.
Las víctimas fueron identificadas como Cristhian Domínguez, Derlis Silva, Roberto Presentado, Roque Ariel Lugo, Roberto Morales, Víctor Olmedo, José Osorio, Pedro Duarte, Derlis Sánchez y Bruno Gutiérrez. La Policía incautó 2 pistolas y una cantidad considerable de armas blancas fabricadas en el mismo penal. En Tacumbú también hubo otro intento de amotinamiento.
ALLANAMIENTO
Posterior a este hecho, se procedió al allanamiento fiscal de la “granja VIP” ubicada a metros de la Penitenciaría Nacional de San Pedro. La intervención estuvo a cargo de la fiscala María Dominga Benítez. En la granja, en la que era la habitación de Benítez, se encontraron un total de 26 proyectiles de un arma calibre 3.80. Se trata del arma incautada en el penal.
Según informaciones del director de la Policía, Víctor Balbuena, los proyectiles fueron proporcionados al PCC por el grupo de reos privilegiados. En la habitación se encontraron también uniformes policial y militar, que eran utilizados por uno de los internos.