María Edith Bordón fue secuestrada el 16 de noviembre del 2001, en momentos en que se encontraba en el parque Ñu Guasu, donde acostumbraba llevar a cabo sus caminatas, con una amiga de nombre Elizabeth Gunther. Ambas mujeres fueron interceptadas por tres hombres armados en el momento en que intentaban abordar el vehículo, quienes a empujones introdujeron a la primera en el asiento trasero y dejaron a Gunther en el lugar.
María Edith fue liberada el 19 de enero del año siguiente, tras 64 días de cautiverio. El primer contacto se produjo el 3 de diciembre del 2001 y los captores pidieron 12 millones de dólares para dejarla en libertad.
Luego de varias negociaciones, el monto solicitado para el rescate fue fijado en 1 millón de dólares. La primera entrega, de 400.000 dólares, se hizo el 14 de enero del 2002 y el resto fue pagado por su marido Antonio Debernardi, ya fallecido, el 17 del mismo mes. Los hermanos de la víctima, Guillermo y Carlos Bordón, fueron los encargados de entregar el dinero.
La liberación de María Edith se produjo el 19 de enero del 2002. Sus captores la vistieron de hombre y la dejaron en las calles Coronel Cabrera y Santa Teresa, de Asunción. Debernardi, previamente, recibió instrucciones acerca de dónde podía recoger a su esposa.
Juan Arrom y Anuncio Martí, dirigentes del Partido Patria Libre (PPL), fueron sindicados también como los posibles responsables por los investigadores, basados en el testimonio de la mujer. Arrom fue identificado como el “guardia bueno” y Martí como el “guardia malo”, según los datos que fueron dados por la afectada al Ministerio Público.