El “Chino” huyó como rata cuando vio que se le venía la noche.
Los senadores cajonearon un año el pedido de juicio político que ya se había aprobado en Diputados a cambio de vaaaarios favores que fueron desde contrataciones de amigos, auditorías a medida y cajoneos de informes.
Hasta último momento quisieron salvarlo. Como siempre, el cura libidinoso con su acostumbrado “ya, pero todavía no”, estuvo pendular todo el tiempo y nunca se supo su posición real.
Había sido el bueno del doctor Querey andaba de joda en joda con el “Chino” con algunas funcionarias de la Contraloría.
Las mismas damas se encargaron de subir a las redes las imágenes que rápidamente fueron viralizadas para indicar cuál iba a ser el sentido del voto del senador luguista. ¡Mirá, vos!
Una lástima que no se llegó a votar por el juicio político.
Varios iban a sacarse la careta y quedar en evidencia, aunque igual se supo quiénes eran los lobos que andaban disfrazados de corderos. Todo se sabe.
El que quedó en evidencia fue EVP. Estuvo furioso en las redes lanzando elucubraciones fantasiosas, cuándo no, sobre supuestos pactos, con tal de defender al “Chino”.
Pasa que su cuñado es Alvarito, el abogado defensor del destituido contralor y es el que lo alimentaba con informacione$ para sus shows habituales en las madrugadas.
Payo, como era de esperarse, apareció ayer en la movilización ciudadana con intenciones de ser el protagonista.
Menos mal solo un grupito, del grueso de la gente movilizada, lo siguió. ¿Será que se dieron cuenta de que Payo se aprovecha del hartazgo de la gente para consolidar su popularidad?
Sería una pena que el reclamo legítimo de la ciudadanía se vea enturbiado por los shows de Payo.