Para el reconocido jurista y analista político Marcelo Duarte, la caída de la dictadura de Alfredo Stroessner junto con la revolución del 47 es uno de los eventos cívicos más importantes de las últimas décadas.
Señaló que la resistencia de la oposición al régimen estronista cumplió un rol sumamente importante, porque fue creando conciencia en la población de que la situación por la que se atravesaba era en realidad un régimen tirano, lo que paulatinamente generó un desgaste en el sistema político que derivó en un levantamiento militar.
“Hay que reconocerlo, se consumó con un levantamiento militar. Pero la actuación de la oposición a la dictadura creó el clima, las condiciones para que primero se produzca el levantamiento militar y, segundo, para que después del golpe se actúe de inmediato con métodos democráticos. Se llamó a elecciones primero y posteriormente se modificó la Constitución Nacional”, señaló.
Consultado de que si creía o no posible la existencia de una corriente explícitamente estronista en la política nacional, dijo que quizás con las mismas actitudes probablemente existan aún personas que creen que la democracia no es la mejor forma de gobierno.
“En todas las sociedades, en el mundo siempre hay un grupo a veces pequeño y a veces no tanto, que sigue creyendo que los regímenes de mano dura son mejores que la democracia; esta forma tendrá su defecto, pero sigue siendo hasta hoy la mejor forma de gobierno”, manifestó.
Agregó que la vuelta de los dirigentes políticos exiliados tuvo un gran valor simbólico para el país, ya que para él el hecho de que las personas que antes eran perseguidas por el régimen imperante en el gobierno puedan volver por voluntad propia en el momento que lo deseen es la demostración más clara de la democracia.
PRÁCTICAS DEL RÉGIMEN ANTERIOR
En cuanto al gobierno actual y las suposiciones de que estaría incentivando a la memoria de Alfredo Stroessner, destacó que indirectamente se presentan cosas que recuerdan algunas prácticas del régimen dictatorial.
“No sé si lo hace a propósito, pero de manera indirecta a veces se presentan gestos que eventualmente nos recuerdan algunas prácticas de la época de Stroessner. No podemos olvidar que el actual presidente es hijo de quien fuera el secretario privado de un dictador”, dijo.
LA CONCIENCIA CÍVICA
Destacó a la vez que en Paraguay ya existen generaciones libres de la cultura estronista, lo que no significa que tenga la suficiente conciencia cívica desarrollada, ya que -según Duarte- la conciencia cívica “es un trabajo que está todavía pendiente en nuestro país”.
En cuanto a los jóvenes de hoy y la impresión que tienen de la época de la dictadura, manifestó que ellos solamente pueden imaginarse a aquella época como “algo muy lejano que sucedió en un Paraguay que no existe”.
EL FAMOSO “CUATRINOMIO DE ORO”
El “Cuatrinomio de Oro” era el grupo que ejercía mayor influencia sobre el dictador Alfredo Stroessner. Estaba conformado por Adán Godoy Jiménez, ministro de Salud; Eugenio Jacquet, ministro de Justicia y Trabajo; Sabino Augusto Montanaro, ministro del Interior, y Mario Abdo Benítez, secretario privado de Stroessner y padre del actual Presidente.
En 1987, los integrantes del “Cuatrinomio de Oro” desplazaron a los colorados “tradicionalistas”, con lo cual dividieron en dos al Partido Colorado. Por un lado estaban los colorados “militantes”, que eran ellos, y por el otro los “tradicionalistas”, encabezados por Juan Ramón Chávez.
Tras el golpe de Estado, Montanaro fue exiliado y regresó al país en el 2009. Dos años más tarde se produjo su deceso. Mario Abdo murió en el 2013 y Godoy falleció en el 2017. Godoy, Abdo Benítez y Jacquet fueron imputados por enriquecimiento ilícito y tuvieron penas carcelarias, mientras que Montanaro había huido del país.