El diputado investigado por enriquecimiento ilícito, Miguel Cuevas, recusó a la fiscala Josefina Aghemo, agente que lleva adelante la pesquisa. Esta maniobra se da ante el acorralamiento por la inminente imputación por declaración falsa del parlamentario, quien inventó una deuda de US$ 1 millón para justificar su patrimonio ante la Contraloría de la República.
La representante del Ministerio Público deberá presentar un informe y posteriormente deberá designar un fiscal interino para manejar el caso. Aghemo había tomado la causa en setiembre pasado, a raíz de la denuncia formulada por el concejal de Ybycuí Ezequiel Cáceres, del Partido Democrático Progresista (PDP). La esposa de Cuevas, Nancy de Jesús Florentín, también está siendo investigada por planillerismo y probable cobro indebido de honorarios como docente en Sapucai.
De zapatero se convirtió en potentado con miles de cabezas de ganado de raza, gigantesca residencia, estancias, etc.
La declaración jurada que Cuevas presentó en setiembre del 2014 consigna que contaba con un patrimonio neto de G. 9.727 millones, de los cuales G. 4.460 millones se respaldaban en una cuenta a cobrar al cuestionado gremialista de la producción Silvio Riveros, quien se encuentra privado de su libertad por desvío de G. 68.000 millones del MAG durante la administración de Enzo Cardozo.
Riveros declaró ante la Fiscalía que no le debe un solo guaraní al ex gobernador de Paraguarí Miguel Cuevas.
La declaración a Riveros sobre este caso se realizó el pasado 18 de diciembre en el penal de Embocada, a cargo del asistente fiscal Pablo Cabral, quien está a cargo de la fiscala Aghemo.
Como Cuevas es protegido del poder de turno, todo apunta a una imputación fiscal por declaración falsa y de esta manera salvarlo de la cárcel. Ante esta posibilidad, el diputado acudió a una chicana para estancar el proceso.
DEFICIENTE GESTIÓN
Entre los clavos que dejó el político del movimiento Colorado Añetete durante su gestión en la Gobernación de Paraguarí podemos citar que no se justificó el uso de combustible por un valor cercano a los G. 1.231 millones. Según las documentaciones de la propia gobernación, el presupuesto para el 2016 para la compra de combustible fue de G. 1.500 millones.
Sin embargo, la administración del ex gobernador apenas justificó la compra de este producto por G. 234 millones, según auditoría de la Contraloría. También se detectaron varias irregularidades en la implementación de la merienda escolar.