Así como ya lo había manifestado en consulta periodística, Silvio Riveros, el ex gremialista privado de su libertad por el famoso desvío de fondos del MAG, ratificó que no le debe un solo guaraní al ex gobernador de Paraguarí, Miguel Cuevas.
El político había declarado a la Contraloría de la República cuenta a cobrar por valor de G. 4.460 millones a Riveros para justificar su patrimonio G. 9.727 millones.
El 18 de diciembre, a las 9:00, el equipo de la fiscala a cargo de la causa, Josefina Aghemo, encabezado por el asistente Pablo Cabral, tomó declaración a Riveros, quien dijo que nunca le debió nada a Cuevas.
Todo apunta a una imputación por declaración falsa del actual presidente de la Cámara de Diputados y protegido político de Colorado Añetete, para que no pise la cárcel por enriquecimiento ilícito, hecho por el que lo denunció el concejal de Ybycuí Ezequiel Cáceres.
La deuda a cobrar no existe y de hecho este punto desapareció de la declaración jurada de Cuevas al conocerse el caso. ¿Cuevas condonó US$ 1 millón a Riveros?, fue la pregunta que lanzó Julio Godoy, abogado del concejal Cáceres, al calificar de una tomadura de pelo los datos consignados y borrados por el ex gobernador de un documento público.
Cuevas es uno de los políticos colorados con extraordinario ascenso económico. De zapatero se convirtió en potentado con miles de cabezas de ganado de raza, gigantesca residencia, estancias, etc. Luego de conocerse su historia y el oscuro origen de su fortuna, el diputado hizo desaparecer más del 50% de su fortuna de los papeles y surgieron como prósperos hacendados sus dos hijos, Enzo y Raúl Cuevas.
A diferencia de otros casos, la Fiscalía maneja con absoluta reserva el caso de Cuevas y los procedimientos se realizan con mucha lentitud. A 4 meses de abrirse la causa, confirmaron que todavía están detrás de pedidos de informe sobre los bienes del diputado.