El gerente general de la Unidad Ejecutora de Proyectos (UEP) (MOPC-BID), licenciado Roberto Enrique, u otra autoridad de la cartera de Obras, no respondió sobre la auditoría que realizó el BID acerca de los defectos detectados en la construcción de la ruta Blas Garay en el tramo a cargo de EDB Construcciones, firma de Enrique Díaz Benza, ex suegro del presidente de la República, Mario Abdo Benítez.
En el 2016, la firma que se adjudicó el servicio de mantenimiento de la referida ruta, Serviam SA, alertó sobre una debilidad en las bases de las capas del asfaltado en el tramo José Leandro Oviedo-Coronel Bogado, trabajo realizado por EDB Construcciones. A raíz de esta observación y ante contradicciones entre la empresa fiscalizadora y la compañía contratada para las tareas de mantenimiento, el ex viceministro de Obras, Juan Manuel Cano, solicitó al BID la realización de una auditoría técnica.
En la solicitud de auditoría que remitió Cano al BID dice que Serviam SA notificó un evento excepcional: “Debilidad de la capa sub-base, producto de materiales inadecuados y espesores menores”. En el escrito se enfatiza que se trata de una “falla prematura del pavimento”, razón por la cual no se realizó el mantenimiento en una parte de la ruta.
El BID realizó la auditoría externa sobre la obra y presentó el resultado al MOPC en octubre pasado. Una de las observaciones señala vicio oculto en la estructura de base.
La ruta no tiene el espesor de las especificaciones del pliego de bases y condiciones, que tenía que ser de 60 cm, pero se hizo de 40 cm.
Este dictamen del BID está cajoneado en el MOPC y nadie quiere proporcionar información sobre las observaciones de esta auditoría que afecta a la firma EDB, cuyo propietario es el ex suegro del presidente de la República.
El organismo solicitó medidas correctivas al Ministerio y no tramitar ningún pago pendiente.
El gerente de la UEP-BID-MOPC evitó dar una respuesta y nos derivó al departamento de prensa. Sin embargo, en esta dependencia nos dijeron que la unidad a cargo de Roberto Enrique es la que tiene que brindar explicaciones.
Ante la falta de respuesta en el MOPC, solicitamos copia de la auditoría al BID, pero en la entidad nos dijeron que corresponde al ministerio proporcionar dicho documento.
El monto global de la obra se había estimado en US$ 34 millones. La sección I, Leandro Oviedo-Artigas, estaba a cargo de EDB y la sección II, General Artigas-Coronel Bogado, a cargo de CDD Construcciones.
TAMPOCO ACLARAN SOBRE PREMIO PARA LA EMPRESA AMIGA
En el MOPC hay fuertes presiones a favor de los intereses de la firma del ex suegro del presidente Mario Abdo Benítez. Los funcionarios señalaron que nadie se anima a sacar una sola observación que afecte a EDB Construcciones, por sus vínculos con el mandatario y con el ministro Arnoldo Wiens. Al contrario, readecuan dictamen para ayudar a la empresa amiga.
Una muestra de cómo en el MOPC se alinean a los intereses de la firma del ex suegro del presidente de la República es el dictamen que elaboró el actual director jurídico Miguel Marín, para premiar con una bonificación a EDB por una obra que entregó con dos años de retraso.
Pese a que la misma Unidad Ejecutora del Proyecto de la Ruta Santa Rosa del Aguaray-Capitán Bado informó que EDB terminó esta obra dos años más tarde de lo previsto en el plazo original del pliego de bases y condiciones del contrato, Marín dictaminó que “corresponde el pago de bonificación por entrega anticipada”.
Un dictamen del anterior asesor jurídico señala que no corresponde el pago, ya que la Unidad Ejecutora dice que no se cumplió el plazo. Marín es el único con opinión favorable al pedido de la firma amiga. Gracias a la ayuda de Marín, se encuentra en proceso el premio de G. 8.600 millones para la firma del ex suegro del presidente Abdo Benítez. Mientras tanto, Wiens se hace del desentendido y se limitó a decir que “vamos a hacer lo que establece el contrato”.