Antonio Ibáñez, padre del ex diputado José María Ibáñez, quien renunció al cargo por presión de la ciudadanía, se incorporó al plantel de fun­cionarios de la Itaipú Binacio­nal. El mismo había dimitido a la titularidad del Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG), acusado de corrup­ción en el 2005.

Como secretario de Estado, durante la administración del ex presidente de la Repú­blica, Nicanor Duarte Frutos, Antonio Ibáñez fundó una empresa fantasma a nombre de uno de sus empleados para comercializar carne a la Poli­cía Nacional de manera irre­gular, según una investiga­ción realizada por el diario Última Hora. Tras el escán­dalo decidió dejar la función pública.

La nueva designación del gobierno de Mario Abdo Benítez genera toda clase de suspicacias y la más fuerte es el pago político. Un cargo a Ibáñez padre, de 73 años de edad, habría sido la “moneda de cambio” para que Ibáñez hijo dejara de embarrar al nuevo gobierno presidido por Abdo Benítez.

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El entonces diputado José María Ibáñez hizo figurar a los cuidadores de su casa quinta, ubicada en Areguá, como empleados de la Cámara de Diputados. Su esposa Lorena Plabst se encargaba de retirar los cheques que eran girados a nombre de los “caseros de oro”, tal como se conoció el caso.

De acuerdo a las investiga­ciones llevadas a cabo por los medios de prensa, los trabaja­dores percibían solamente la mitad del dinero que los Ibáñez retiraban de la Cámara Baja.

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