Gisele Mousques hace parte de las primeras mujeres reservistas de las Fuerzas Armadas de la Nación. Instó a otras mujeres a animarse en las próximas convocatorias. Foto: Jorge Jara
Primeras mujeres reservistas del país: “Estamos preparadas para todo”
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Gisele Mousques, una de las primeras mujeres reservistas del Centro de Instrucción Militar para Estudiantes y Formación de Oficiales de Reserva (Cimefor), relató su experiencia y formación en las filas militares del país. Este jueves, la primera remesa de mujeres que ingresaron a la Cimefor egresaron en la promoción 2025.
Con un duro entrenamiento, pero con la convicción firme de servir a la patria, Mousques finalizó el curso de formación militar, y calificó esta experiencia como increíble y única. Contó que tomó la decisión de inscribirse ni bien se dio el anuncio de la apertura del Cimefor para las mujeres.
“Toda mi vida quise tener esta experiencia, pero no se dio la oportunidad en su momento y dije que no se iba a dar, pero ni bien me enteré, lo primero que hice fue acudir al llamado, por dos razones, en primer lugar, yo soy una persona muy patriota y me siento útil cuando sirvo a la sociedad, desde donde me toque”, expresó en entrevista para La Nación/Nación Media.
A pesar de un entrenamiento duro, Mousques aseguró que cumplió con toda la preparación física y mental de este proceso. “Mi experiencia allá adentro fue única, increíble, durísima, pero muy enriquecedora. Hice, como Gisele Mousques, absolutamente todo lo que se me mandó allá adentro, jamás he pisado enfermería. Yo toda mi vida me cuidé, no fumo, no tomo, me cuido mucho en hacer ejercicios, en hacer actividades, por ese lado yo estaba más tranquila”, indicó.
Gisele Mousques agradeció el apoyo de su familia en este proceso. Foto: Jorge Jara
Servir a la patria
Mousques indicó, además, que el servicio militar debería ser un proceso que todo ciudadano paraguayo, tanto hombres como mujeres, deben cumplir, principalmente para estar al servicio de la patria en cualquier ocasión que se requiera.
“Yo estoy muy agradecida de que se haya dado esta oportunidad a nivel de Comando el Jefe, porque realmente es algo que sí o sí todo ciudadano y ciudadana debe hacer porque el enrolarte para ser reserva de tu patria, no solamente cuando hay guerra, sino para cualquier actividad que se necesite, puede ser como en tiempos de covid, de salir a ayudar a la gente o si hay algún incendio, lo que sea, vos estás como reserva de la patria”, apuntó.,
Preparadas para todo
Así también, destacó que este primer egreso de mujeres con formación militar será un paso muy importante para el país, ya que reciben una preparación estricta, como manejo de armas, estrategias militares, pero principalmente valores y el amor a la patria.
“Ser las primeras mujeres y que realmente nos den la cuenta del valor que tiene la mujer es algo que tenía que darse y me encanta que haya sido en el puesto de mejor egresado. Las mujeres paraguayas realmente, como dijo el papa Francisco, las más gloriosas de América”, manifestó.
Que otras mujeres se animen
Finalmente, dejó un mensaje a todas las mujeres que no ingresaron en este primer llamado, pero tengan el deseo de realizarlo en la próxima ocasión, de animarse a pasar por este proceso de formación. “Fueron 1.045 mujeres las que se enrolaron en esta vuelta y animo a todas, porque si yo pude, con la disciplina, con la fortalece espiritual, con el orden, la disciplina que inculcan ahí, jóvenes tienen que animarse”, sentenció.
El presidente Santiago Peña, en su carácter de Comandante en Jefe de las Fuerzas Armadas de la Nación, encabezó la ceremonia de egreso de los cimeforistas de la promoción 2025. Foto: Gentileza
El mandatario Santiago Peña indicó que este 2025 marca un hito en la historia de las Fuerzas Armadas, teniendo en cuenta que, por primera vez, mujeres paraguayas forman parte del Cimefor. Foto: Gentileza
Cimefor: Peña encabezó el egreso de 125 subtenientes y guardiamarina
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El mandatario Santiago Peña, en su carácter de Comandante en Jefe de las Fuerzas Armadas de la Nación, encabezó este jueves la ceremonia de egreso de los cimeforistas pertenecientes a la promoción 2025. La actividad se desarrolló en la sede del Regimiento de Caballería N.° 4, localizado en la zona de Loma Pytá, Asunción.
En esta ocasión se concretó la graduación de un total de 125 subtenientes y guardiamarinas de reserva. “Compatriotas, ¿puede existir algo más valioso, más sublime y más inspirador que el hecho de estar dispuesto a dar la vida por el país? Decididamente creo que no. Yo creo que el acto supremo de abnegación, sacrificio y de amor al semejante y al Paraguay es ser parte de las gloriosas Fuerzas Armadas de este país”, comentó Peña.
Asimismo, el jefe de Estado acotó: “La milicia paraguaya, con tantas páginas de gloria, hoy encuentra en ustedes, queridos egresados, una nueva alborada vibrante de patriotismo y de entrega a la nación. Este no es solo el cierre de una etapa de formación, sino el inicio de un compromiso que trasciende todo lo que aprendieron en el aula y en el terreno. Ustedes no solo han adquirido conocimientos, sino también habilidades militares; han fortalecido principios que, hoy más que nunca, son tan indispensables como carentes: la disciplina, el honor, la lealtad y el sacrificio”.
La actividad fue desarrollada en la sede del Regimiento de Caballería N° 4, localizado en la zona de Loma Pyta, Asunción.
Peña mencionó además que la instrucción militar para estudiantes y formación de oficiales de reserva permite comprender que la defensa nacional, como pilar de la seguridad integral del Estado, “no es una responsabilidad exclusiva de soldados en armas, sino un deber compartido por cada ciudadano que ama a su tierra y está dispuesto a preservar sus valores, soberanía e identidad”.
Por otra parte, indicó que este 2025 marca un hito en la historia de las Fuerzas Armadas, teniendo en cuenta que, por primera vez, las mujeres paraguayas forman parte del Cimefor. “Nuestra valiente kuña paraguaya ha ingresado a las filas del Cimefor, consolidando su lugar en la formación castrense. No se trata de un gesto meramente simbólico, sino de un reconocimiento merecido a su inquebrantable fortaleza, a su capacidad de liderar, resistir y superar cualquier adversidad”, puntualizó.
Más de 1.700 reservistas serán los egresados de este año en el curso de formación militar del Centro de Instrucción Militar para Estudiantes y Formación de Oficiales de Reserva (Cimefor). Foto: Jorge Jara
Primer grupo de reservistas mujeres de Cimefor se gradúan mañana
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La primera camada de mujeres que ingresaron al Centro de Instrucción Militar para Estudiantes y Formación de Oficiales de Reserva (Cimefor) se graduarán mañana. El ministro de Defensa Nacional, Óscar González, informó que son alrededor de 1.700 reservistas culminaron el proceso de formación militar, entre hombres y mujeres, que llevó un proceso de instrucción de seis semanas.
La ceremonia de egreso de subtenientes y guardiamarinas se realizará mañana jueves 13 de febrero, en el asiento del Regimiento de Caballería N°4 “Acá Caraya” a las 7:30, en Loma Pytá, Asunción.
“En la formación estarán 1.700 cimeforistas, entre hombres y mujeres. Se inscribieron 1.920, pero entre los que se inscribieron algunos no se presentaron y otros abandonaron después de empezar la instrucción, fue mínima la deserción”, detalló el ministro de Defensa en entrevista para La Nación/Nación Media.
El ministro explicó que las personas que ingresaron al Cimefor, reciben instrucciones y formación militar como reservistas para estar al servicio de la patria y las Fuerzas Militares, además de servir como base de instrucción para cursar en otras áreas de las Fuerzas Armadas del Paraguay.
“La instrucción militar que reciben ellos para formarse como oficial de reserva, porque Cimefor es un centro de formación, el objetivo es preparar al joven, a las mujeres y varones para convertirse en reservistas, en reservas de la patria, y el reservista es aquel que tiene conocimientos de la instrucción militar para defender a la patria”, indicó.
A inicios del mes de enero, se dio el ingreso de un total de 1.045 mujeres al Cimefor de forma voluntaria, marcando un hito en la historia de las Fuerzas Armadas del Paraguay, teniendo en cuenta que se concreta por primera vez bajo el gobierno del presidente Santiago Peña, la autorización del ingreso de mujeres para este servicio.
La vocación de servir a la patria no conoce de límites
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Desafiando los prejuicios y los lugares comunes, profesionales jubilados se propusieron derribar los límites de edad y los estereotipos de género para alistarse en la Armada Paraguaya a fin de brindar su servicio a la patria. Dos aspirantes cuentan la experiencia y destacan los cuarteles como lugares donde se adquieren aprendizajes útiles para todos los ámbitos de la vida.
Fotos: Jorge Jara / Gentileza
La Armada Paraguaya abrió en el presente año la convocatoria del Centro de Instrucción Militar y Formación de Oficiales de Reserva (Cimefor) a hombres y mujeres sin límite de edad, algo que brinda la oportunidad a aquellos que consideren la instrucción castrense como su forma de servicio a la sociedad.
“El servicio militar es un lugar donde uno forja el espíritu y aprende a valorar al semejante, aprende a valorar lo que uno es y lo que uno tiene. Y practica valores como la disciplina aprendiendo a ser un ciudadano útil a la sociedad”, refiere Luis Urunaga (62), aspirante de primer año en el Cimefor.
Desde hace tres semanas, Urunaga forma parte del pelotón de la Armada Paraguaya en Ciudad del Este, desafiando el prejuicio etario y reivindicando el sentido de ser útil para el otro.
OPOSICIÓN
“‘El cuartel es para los jóvenes’, me dijeron, y yo les dije que no y que voy a pasar (la admisión) y que voy a cumplir, y que voy a llegar a ser subteniente de reserva de la Marina”, explica don Luis sobre cómo confrontó la oposición de su familia en un primer momento logrando que hoy lo apoyen íntegramente en la decisión que tomó.
Hijo de agricultores, Urunaga vive hace 55 años en la capital del Alto Paraná, donde formó una familia con seis hijos. Es un emprendedor metalúrgico y cuenta con una empresa familiar en el rubro de la salud.
“Desde cuando era joven yo quería hacer mi servicio militar, me presenté para hacer mi servicio militar y no me enrolaron en aquella época. En los primeros tiempos estuve en la reserva. En la reserva informaron que iba a haber el alistamiento acá en Ciudad del Este y ahí yo me presenté y me alisté”, refiere.
Urunaga desarrolló su vida como profesional, como padre y esposo, y actualmente busca seguir siendo útil a la sociedad formándose en el cuartel y, al mismo tiempo, buscando inspirar a jóvenes en valores como el amor a la patria.
De adolescente se presentó al servicio militar, estuvo a cargo de superiores, pero no recibió instrucción ni baja, por lo que hoy busca subsanar ese pendiente que él no solo considera que es consigo, sino con la patria misma.
“No es solamente tener la baja, sino que es servir a la patria y al semejante. Ese es mi objetivo principal”, refirió.
TEMOR
Por su parte, María Cristina Maldonado, docente de 52 años que forma parte del pelotón de aspirantes en el Cimefor de la Armada de Asunción, relata que al llegar primeramente sintió un temor de no ser aceptada, pero que inmediatamente notó muy buena apertura en la fuerza.
“Ellos me recibieron muy bien. Entonces me presenté. Ciertamente mis camaradas la mayoría son jovencitas. Ellas me miraban de entrada y me dicen algunas todavía ‘señora’ y yo les digo ‘camaradas’. La disciplina es impresionante. Ellas aprenden, yo también aprendo cosas, por ejemplo, a hacer las cosas rápido, porque acá todo es rápido”, comenta Maldonado.
Madre de un hijo estudiante de medicina, jubilada en el magisterio público y activa aún en el sector privado, licenciada en Ciencias de la Educación, esposa y miembro de la reserva activa de la milicia, este año María Cristina desafió sus propios temores al asistir a la convocatoria de la Armada, también con esa visión del servicio.
“Las ganas comenzaron ya de niña. Mi padre fue militar, mi abuelo, tengo tíos militares, mi esposo también es reservista y mi hijo el año pasado terminó acá justamente en la Armada, es guardiamarina de reserva. Recorrí mucho los cuarteles detrás de mi papá, de mi abuelo también y ahí comenzó todo”, indicó.
Luis Urunaga (62), aspirante de primer año en el Cimefor de Ciudad del Este
PATRIOTISMO
Los aspirantes Urunaga y Maldonado fueron destacados durante esta semana desde el relato de superación personal y de historias que revelan la perseverancia y el valor de las personas adultas que aún se sienten útiles y tienen mucho que dar. Sin embargo, para ambos lo más importante es lo institucional y el patriotismo.
“El patriotismo es servir a la patria y estar preparado para cualquier llamamiento que necesita el país como, por ejemplo, defender nuestros territorios. Hay patriotismo cuando uno hace un trabajo, profesional o no profesional, haciendo una actividad dentro del país. De esta manera está sirviendo a la patria de una u otra forma”, sostiene don Urunaga.
En tanto, Maldonado esgrime que “para mí el patriotismo es amar, respetar los símbolos patrios. En mi colegio cuando cantábamos el Himno Nacional, nosotros poníamos la mano derecha sobre el corazón. Hay todavía gente patriota y eso yo quiero enseñar. Personalmente, insto a los jóvenes a venir a los cuarteles y a las personas más grandes también. Las personas mayores que sientan la juventud dentro y las ganas yo las motivo a que vengan”.
María Cristina Maldonado, docente de 52 años que forma parte del pelotón de aspirantes en el Cimefor de la Armada de Asunción
DESAFÍOS
Don Luis relata que “todos hacemos la misma actividad. A las seis de la mañana comenzamos con la parte física y después seguimos con la instrucción, orden cerrado con armas y sin armas. Hago todo con ellos. Estamos dos pelotones, hay 32 mujeres y 6 hombres, parece que los hombres están perdiendo en convocatoria”.
En su caso no tuvo tiempo para realizar una preparación previa, pero espera poder hacerlo el próximo año, ya que pretende asistir durante los tres periodos y a los 64 años llegar al grado de guardiamarina.
“Yo tengo mente positiva, creo que gané (ante los prejuicios). Mi gran temor fue que no me acepten por la edad. He escuchado varias opiniones muy negativas por mi edad del tipo ‘¿por qué esa abuela no se queda en su casa?’. Pero no hago caso, estoy tranquila y con mente positiva. Llego a mi casa, hago lo que tengo que hacer como mamá y como esposa y luego preparo mi uniforme para el día siguiente y ni miro las redes”, comenta Maldonado.
La prevalencia de aspirantes femeninas también se destaca en Asunción y estas tienen la posibilidad de pernoctar o no en las instalaciones de la institución.
“Físicamente yo estoy activa 100 %. El que me llama abuela no sé por qué lo hace. Con 52 años yo hago todos los ejercicios, tengo ganas de hacer, estoy con jóvenes, por eso sigo enseñando, no me quedé en mi casa a dormir. Yo estoy muy activa y feliz. La juventud es contagiante”, agregó la aspirante.
FORMACIÓN INTEGRAL
El Cimefor surgió en 1969 y fue durante décadas una forma de compaginar la formación escolar con la instrucción militar obligatoria, fraccionando en tres periodos de seis semanas el tiempo de concurrencia.
Sin la obligación legal y social de asistir, María Cristina y Luis ven en el Cimefor un espacio de formación integral para ellos y para los jóvenes.
“Acá hay una formación integral. Yo creo que mis camaradas, las más jovencitas, van a llevar algo bueno y lo van a aplicar en sus vidas. Eso es bueno que la gente entienda. No es que venimos a conocer las armas, sino que se nos enseña de todo. Hay una formación integral, comportamiento fuera y dentro del cuartel”, explica.
“Yo invito a los hombres en general sin límite de edad a que se animen. Hay muchos que quieren integrar, pero no se animan. Les digo que se animen y que vengan, que vean y sepan cómo es en realidad el cuartel. No es como mucha gente piensa que el cuartel es un lugar donde hay maltratos. No es así, tienen que venir y probar y comprobar. Porque acá, por ejemplo, demasiado bien nos tratan los superiores”, concluye don Luis.
Puertas abiertas
“Si bien causa sorpresa que haya más mujeres inscriptas, considerando el entorno y el momento se puede decir también que no es muy novedoso, porque las mujeres están muy interesadas en desarrollarse y desenvolverse en nuevos ámbitos. Entonces, digamos que eso se esperaba, pero de igual manera sorprende el hecho de que se animen, porque es un poco difícil arriesgarse a lo desconocido y como esta es la primera promoción femenina de aspirantes de Cimefor, no hay alguien que les pueda anticipar con su experiencia cómo va a ser alistarse, sino es algo nuevo que ellas vienen a experimentar”, señala la teniente de navío maquinista Érica Olazar.
Comandante de la Compañía Femenina del Cimefor de la Armada Paraguaya Asunción, Olazar es una oficial de carrera que hace 14 años egresó de la Academia Militar, en tiempos en los que el prejuicio respecto a las capacidades de las mujeres en el ámbito militar estaba mucho más arraigado.
“Yo creo que los prejuicios se van derribando con el tiempo porque las mujeres ya estamos dentro de las Fuerzas Armadas. Si bien el Paraguay se caracteriza por el machismo, yo creo que esto se fue rompiendo. Ahora las mujeres estamos dentro de las Fuerzas Armadas, las aspirantes cimeforistas entran en un contexto de menos prejuicios y eso se puede ver con la igualdad de oportunidad que se está dando y se demuestra así que no hay un prejuicio desde el entorno mismo”, refirió.
La convocatoria atrajo a mujeres en diversas situaciones, algunas madres, otras estudiantes universitarias y gente mayor, en muchos casos con apoyo familiar y en otros tal vez en medio de disputas que aún están en proceso de resolución.
“Como comandante de compañía, algo que me llama mucho la atención es que todas estas mujeres que se presentaron para el Cimefor vinieron convencidas. Yo creo que un condimento especial para poder hacer bien las cosas es querer y todas ellas vinieron porque quieren. Entonces, eso facilita el aprendizaje de todas las mujeres que están aquí en cuanto al entrenamiento físico y las instrucciones teóricas. Ellas asimilan muy rápido el conocimiento porque se nota la predisposición de ellas”, indica la oficial.
La mentalidad sexista no solo privó a las mujeres del ejercicio de prácticas sociales igualitarias en otros tiempos, sino también al Estado del servicio público que implica la carrera militar.
“Para las personas que están allá afuera todavía dudando, un mensaje sería decirles que nunca se quedan con la duda. Y segundo, ya teniendo esta experiencia, que están viendo mujeres que están aquí preparándose y formándose, el escenario que les espera es tener ya nuestra primera promoción de cimeforistas femeninas que les van a orientar a ellas y les van a contar incluso la experiencia, porque la disciplina militar puede ser aplicada incluso en el entorno civil. Como yo les digo a todas mis aspirantes, todo lo que se aprende aquí uno nuevamente vuelve a adaptar en su vida diaria donde se vaya desenvolviendo, en todos los ámbitos”, finalizó.
REQUISITOS Y MODALIDADES DE LA CONVOCATORIA
Para los aspirantes es obligatorio haber culminado los estudios secundarios, ser paraguayo natural o naturalizado y haber cumplido los 18 años.
Se desarrollarán seis semanas de instrucción. Desde el 2 de enero hasta la quincena de febrero de 2025, los cimeforistas culminarán su jornada del día y retornarán a sus casas.
Las instrucciones principales que se tendrán serán procedimientos básicos navales a bordo de los buques de la Armada Paraguaya, técnicas y tácticas básicas de infantería de marina, natación utilitaria, primeros auxilios y legislación en el ámbito fluvial.
Este año los puntos habilitados para alistarse al servicio son la Armada de Asunción, Salto del Guairá, Encarnación, Ciudad del Este y Villa del Rosario (San Pedro).