La noticia que se convirtió en lo más destacado de este viernes, fue el asesinato a Francisco Luis Correa Galeano, sindicado como el cerebro y el articulador del crimen contra el fiscal paraguayo Marcelo Pecci. Desde tempranas horas han revelado el nombre de quien perpetró el homicidio que se dio en La Picota, penal de Bogotá.
Samuel Zuleta Márquez es el responsable del asesinato a Correa Galeano según consta en el reporte que fue enviado a la ministra de Justicia de Colombia, Ángela María Buitrago. De acuerdo a los datos que se tienen hasta el momento, el cerebro del crimen contra Pecci fue encontrado en el suelo rodeado de sangre y horas más tarde dieron con el arma blanca que habría sido utilizada para el hecho.
El medio colombiano El Tiempo informó que Zuleta Márquez es un presunto miembro de una estructura paramilitar denominada “Los Paisas”. Fue capturado en mayo de 2010 cuando transportaba en un vehículo, dos pistolas, 23 cartuchos para las mismas, además de un silenciador.
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En ese momento, se tenía la ferviente convicción de que estas armas fueron utilizadas para que el grupo criminal cometa varios asesinatos. Este hecho le valió una condena de siete años y medio de prisión por portación ilegal de armas.
La organización criminal “Los Paisas”, tenía su base principal de operaciones en Medellín, su trabajo estaba principalmente en las ciudades y pueblos pequeños, donde trataban de controlar los flujos de drogas hacia la costa y la vendían a organizaciones que contaban con infraestructura más grande y con capacidad de mover la droga en el exterior.
La investigación sobre cómo se dio la muerte de Correa Galeano está en curso, pero los primeros reportes indicaban que fue en medio de una riña en la celda 25 del pabellón 32 del centro penitenciario. El ahora fallecido, habría sufrido múltiples heridas provocadas con un arma blanca.
Cuestionan negligencia
El abogado de la familia Pecci, Francisco Bernate se pronunció tras este hecho, y habló sobre lo preocupante que resulta este acontecimiento, puesto que es una señal de que quien ordenó el crimen contra el fiscal paraguayo, aún está suelto.
“Esto no fue una riña o una pelea por cualquier cosa. Se debe determinar qué fue lo que pasó, que se investigue. Nosotros pensamos que él estaba protegido, nunca pensamos que él estaba en la deriva en esa penitenciaría común y corriente, para nosotros esto es absolutamente una negligencia”, lamentó.