La mesa directiva del Senado convocó al titular de la Secretaría Nacional Antidrogas (Senad), Jalil Rachid, para el próximo 3 de junio a las 9:00. En esta ocasión, la citación oficial al alto funcionario de Estado fue planteada por las bancadas que integran la mesa directa de la Cámara Alta mediante los conductos correspondientes, es decir, vía presidencia.
Inicialmente, la convocatoria a Rachid había sido planteada solo por la bancada democrática, liderada por la izquierdista Esperanza Martínez y conformada por opositores, incumpliendo con el reglamento interno y evadiendo comunicar a los demás sectores políticos con representación en el Senado.
El llamado surge con la finalidad de que Rachid pueda proporcionar al Legislativo informaciones sobre las supuestas filtraciones en el marco de la causa A Ultranza Py, situación que dejó en descubierto la vinculación del supuesto narco Miguel Ángel Insfrán, alias Tío Rico, con la Secretaría Nacional Antidrogas (Senad) en el tiempo en que Arnaldo Giuzzio lideraba la institución.
“Independiente a todas las conjeturas que se dan, lo bueno es que sepamos de la propia autoridad competente el desenlace que tuvo todo esto que se informa a través de la prensa”, dijo el presidente del Senado, Silvio “Beto” Ovelar, en una entrevista con los medios de comunicación.
De acuerdo al Ministerio Público, las filtraciones de informaciones a la organización criminal de Tío Rico se concretaban desde la Dirección de Inteligencia Técnica de la Senad, encabezada en ese entonces por un hombre de confianza de Giuzzio.
La situación se sustenta en una serie de mensajes encriptados entre Tío Rico y el también narco uruguayo Sebastián Marset, donde Insfrán se jacta de su contacto en la Senad y de su amistad con “los de arriba” para zafar de los operativos antidrogas y de esa manera lograr la exportación de cocaína a Europa.