Una de las intenciones del gobierno nacional es que el Mercado Común del Sur (Mercosur), logre concretar un acuerdo comercial con los Emiratos Árabes, independientemente de que esto se concrete o no, el país de medio oriente está interesado en financiar obras relacionadas al corredor bioceánico, así lo confirmó Carlos Fernández Valdovinos, ministro de Economía y Finanzas (MEF).
“Su alteza de Emiratos Árabes firmó un acuerdo con los presidentes del Mercosur que estaban presentes en la COP-28, en donde él mismo prometió fondos para todo lo que esté relacionado a integración bioceánica. Ellos están dispuestos a dar en condiciones financieras favorables, recursos para la terminación de la bioceánica o puentes que tienen que complementar la obra, entre otros”, aseguró.
El secretario de Estado afirmó que existe un gran interés por parte de este país hacia Latinoamérica en general, también desde el punto de vista de los alimentos. Esto representa una oportunidad para Paraguay, teniendo en cuenta los altos estándares que se manejan en cuanto a seguridad alimentaria, y es lo que precisamente, muchas naciones árabes están buscando.
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“Con la intención que tiene el presidente Santiago Peña de cerrar un acuerdo de libre comercio con los Emiratos Árabes, va a permitir no solo un mayor comercio, sino estrechar todos los lazos económicos que podamos tener con los países árabes”, manifestó el ministro de Economía a la 1080 AM.
Paraguay cuenta con grandes oportunidades para acceder a los recursos que necesita para el desarrollo, aseguró el titular del MEF, quien mencionó que la Itaipú Binacional podría generar los recursos suficientes para destinar a la inversión, si se establece una tarifa energética conveniente con el Brasil.
“Tenemos que ser inteligentes de manera a aprovechar las oportunidades, pero en resumen estamos viendo diferentes lugares en donde podamos tener financiamiento favorable de tal manera a hacer frente a la infraestructura que necesitamos”, concluyó.
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Crecimiento económico del 4 % para 2025 estará impulsado por sectores no agrícolas
El Ministro de Economía y Finanzas (MEF), Carlos Fernández Valdovinos, ha declarado que se proyecta un crecimiento económico del 4% para el presente año, impulsado fundamentalmente por el desempeño positivo de los sectores no agrícolas y la generación hidroeléctrica de las represas binacionales.
“Los datos que recoge el Banco Central del Paraguay (BCP) hablan de que los sectores no agrícolas están creciendo a un ritmo del 6,1 %. Y este será el tercer año en que la economía terminará creciendo un 4 % o más”, afirmó Fernández Valdovinos, según refiere el MEF.
Sin embargo, el ministro reconoció que desde el gobierno están conscientes de que aún hay mucho camino por recorrer para lograr que Paraguay sea un país totalmente desarrollado, tanto en el sector económico como social. Al margen, valoró los números relacionados al aumento del empleo y la reducción de la pobreza en el año 2024, con respecto al 2023, y resaltó que el índice de la población en extrema pobreza se redujo de 50 % al 20 % desde el 2002.
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“Los datos dan una coyuntura económica buena. Pero la realidad es que tenemos que seguir avanzando, Paraguay es un país emergente y nos gustaría ver a nuestro país totalmente desarrollado, no solo en lo económico sino también en lo social”, expresó.
Referente a los programas sociales, dijo que fueron un complemento para el efecto de crecimiento económico en niveles de pobreza y que lo redujo aún más. Sostuvo que es el tipo de política que necesitamos acá en Paraguay, una que permita invertir al sector privado, que crezca la economía, se creen puestos de trabajo y eso reduzca la pobreza, complementada con políticas públicas focalizadas.
Volvió a reiterar que la expectativa de expansión económica manejada desde el MEF para este año es del 4 %, y que sea movida por sectores no agrícolas, lo que es una muestra positiva de que nuestro país está empezando a diversificar su economía.
2025
Con una proyección de crecimiento del producto interno bruto (PIB) del 3,5 % al 3,6 %, según el Banco Mundial y el reporte macroeconómico de Itaú, Paraguay se posiciona como la segunda economía de mayor expansión en la región, detrás de Argentina. Este desempeño es notable, especialmente si se considera que el contexto global y regional sigue siendo desafiante.
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Ejecución de la Administración Central alcanzó los G. 15,9 billones al primer trimestre del año
Según el informe de ejecución financiera de la Administración Central, la ejecución presupuestaria ascendió a G. 15,9 billones al cierre del primer trimestre del 2025, representando el 21 % del presupuesto vigente asignado, que asciende a G. 75,5 billones en el mencionado periodo.
Las entidades con mayor ejecución en el período señalado fueron los Ministerios de Economía y Finanzas, Educación y Ciencias, Salud Pública y Bienestar Social, de Obras Públicas y Comunicaciones, del Interior y de Desarrollo Social.
En el informe se detalla que la obligación financiera del Ministerio de Economía fue de G. 4,9 billones, de los cuales G. 4,7 billones fueron destinados al pago a jubilados y pensionados de la función pública, transferencia monetaria a gobiernos subnacionales y el pago de la deuda pública.
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El Ministerio de Educación ejecutó G. 2,4 billones, de los cuales el 65 % fue para los servicios educativos del primer, segundo y tercer ciclo de la educación escolar básica y educación media, como también para la educación de jóvenes y adultos de 15 años y más. En tanto que Salud Pública ejecutó G. 2,2 billones, cuyo desembolso fue principalmente para el pago de servicios personales y compra de productos e instrumentos químicos y medicinales.
Por su parte, Obras Públicas utilizó un total de G. 1,5 billones, de los cuales G. 1,01 billón fue destinado al programa de red vial pavimentada, siendo la cartera con mayores ejecuciones en los proyectos de ampliación y duplicación de las rutas PY02 y PY07, además del mejoramiento tramo Pedro J. Caballero-Capitán Bado-Ypehu.
El Ministerio del Interior ejecutó G. 988.000 millones, principalmente para el pago de servicios personales. Mientras que el de Desarrollo Social utilizó de G. 954.000 millones, principalmente para el pago de pensión alimentaria a adultos mayores y a las familias participantes de Tekoporã, también para la provisión de alimentación escolar–FONAE, refiere el documento informativo.
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Déficit fiscal asciende a 0,8 % al cierre de marzo
Al cierre del primer trimestre del 2025 se registró un déficit fiscal acumulado de 0,8 % del producto interno bruto (PIB) por un valor de G. 2.830 mil millones, cerca de USD 357 millones, según el informe de Situación Financiera (Situfin) que dio a conocer el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF).
Respecto al déficit anualizado, este se ubica en 2,8 % del PIB y es explicado en gran parte por una mayor dinámica del gasto en medicamentos, alimentación escolar e intereses. Según el MEF, los esfuerzos por mantener una ejecución equilibrada durante todo el año para la inversión pública, contribuyó a que se superen los niveles históricos de ejecución presupuestaria al finalizar marzo.
Al finalizar marzo, el ingreso total tuvo un aumento de 14,8 %, un incremento de 0,3 puntos porcentuales del PIB, en comparación al primer trimestre del 2024. Este crecimiento fue impulsado principalmente por la buena dinámica de la recaudación tributaria tanto en impuestos internos como externos.
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En detalles, los impuestos internos representan una variación acumulada del 7,7 %. El Impuesto al Valor Agregado (IVA) con 5,4 %, el Impuesto a la Renta Empresarial (IRE) con 2 %, el Impuesto Selectivo al Consumo (ISC) con 0,8 % y el Impuesto a la Renta Personal (IRP) con 1,4 %. En negativo se registró un 2,4 % en el Impuesto por Distribución de Dividendos y Utilidades (IDU).
La contribución a la variación acumulada de los impuestos externos se desprende de la siguiente manera: a marzo de este año se registró un total de 14,1 %. El IVA representa un 7,7 %, los aranceles 6,1 %, y otros impuestos 2,9 %.
Los ingresos no tributarios crecieron 22,3 %, explicado principalmente por la contribución de los recursos de las represas binacionales Itaipú y Yacyretá. Los salarios financiados con ingresos tributarios se mantienen cercanos al mínimo histórico. El 79 % de los salarios se destina a los sectores de salud, educación y seguridad.
Gastos
Los gastos aumentaron en 11,4 %, debido al aumento del gasto en medicamentos y alimentación escolar, donde destacan el fortalecimiento en los sectores estratégicos de salud, educación y seguridad, que representaron el 74,1 % del gasto total. La inversión pública asciende a G. 1.754 mil millones, equivalente a USD 221,6 millones, y al primer trimestre representó el 0,5 % del PIB, mayor en 0,3 puntos porcentuales con respecto al primer trimestre de 2024.
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Aranceles y el Mercosur
- Carlos A. Primo Braga
- Profesor de la Fundación Dom Cabral, Brasil
El 2 de abril (denominado Liberation Day por el presidente Trump), el Gobierno de los Estados Unidos anunció la imposición de aranceles recíprocos que afectan a cerca de 185 países. A partir del 5 de abril, se sumaron aranceles del 10 % a los ya existentes, y desde el 9 de abril deberían imponerse aranceles adicionales a los países considerados como los peores infractores, con base en una “evaluación” sobre cómo sus políticas afectan las exportaciones estadounidenses.
Los mercados financieros en todo el mundo, y particularmente en EE. UU., reaccionaron de forma dramática en los días posteriores al anuncio. El índice NASDAQ, por ejemplo, que refleja el desempeño del sector tecnológico, cayó alrededor de un 9,8 % en los dos días siguientes, una corrección significativa en relación con su nivel máximo anterior.
Estos aranceles se suman a otros anunciados previamente por la administración Trump, dirigidos principalmente a China (incluyendo un arancel del 20 % como sanción por el comercio ilícito de fentanilo y aranceles del 25 % sobre automóviles, acero y aluminio). En síntesis, los productos chinos pasarán a enfrentar aranceles totales del 54 % (20 % vinculados al tema del fentanilo y 34 % por el cálculo de reciprocidad) y, en algunos casos, específicos (como los automóviles, considerados una amenaza a la seguridad nacional), los aranceles podrían alcanzar hasta un 79 %. China respondió con una tarifa adicional del 34 % sobre exportaciones estadounidenses. Posteriormente, el gobierno de Trump reaccionó a esta decisión imponiendo un arancel adicional del 50 % sobre productos chinos el 8 de abril.
El cálculo de los aranceles recíprocos por parte de la Oficina del Representante Comercial de los Estados Unidos (USTR) fue recibido con escepticismo y críticas sobre la arbitrariedad del método utilizado. La fórmula adoptada se basa, esencialmente, en dividir el déficit comercial de EE. UU. en bienes con cada país entre el valor de las importaciones provenientes de dicho socio comercial, como una proxy de un arancel que equilibraría los flujos comerciales. La fórmula también incluye en el denominador una estimación de la elasticidad de las importaciones respecto a los precios y de los precios respecto a los aranceles; sin embargo, al haber asignado arbitrariamente los valores 4 y 0,25, el producto de dichas elasticidades es igual a 1. El valor resultante de esta división fue reducido a la mitad, según el presidente Trump, para reflejar la magnanimidad estadounidense. En el caso de países con superávit comercial con EE. UU. (como Brasil), así como en situaciones especiales (como Afganistán), se estableció un arancel recíproco del 10 %.
El 9 de abril, el presidente Trump anunció una pausa de 90 días en la implementación de estos aranceles para la mayoría de los países, con excepción de China. Para los países que no respondieron con represalias, solo se aplicará el arancel adicional del 10 % hasta junio. En el caso de China, sigue vigente un arancel acumulado del 145 %, mientras que para Canadá y México se aplicarán aranceles del 25 % sobre productos que no cumplan con las normas del acuerdo USMCA (que sustituyó al NAFTA). China respondió de inmediato, elevando sus tarifas a un 125 % sobre productos estadounidenses.
El arancel medio en EE. UU. se incrementará a aproximadamente un 22,5 %, con picos importantes para ciertos países (como China) y productos. Este nivel remite a lo ocurrido en la década de 1930 y sus consecuencias negativas para la economía global. Asimismo, la lógica de la fórmula (centrada únicamente en el comercio de bienes, ignorando los servicios donde EE. UU. suele registrar superávit), la elección arbitraria del año 2024 como base para los cálculos —a pesar de que los déficits comerciales varían con el tiempo—, el desconocimiento de las estructuras proteccionistas de los socios comerciales, y las causas macroeconómicas de los desequilibrios en la balanza de pagos (como el desajuste entre ahorro e inversión) han sido señalados como puntos críticos de esta metodología.
Para los países del Mercosur, hay tanto buenas como malas noticias. Es cierto que los miembros del bloque fueron “beneficiados” con un arancel recíproco mínimo del 10 %, muy por debajo del promedio general y de los valores máximos aplicados a otros países. Sin embargo, el impacto puede ser perjudicial, no solo por los efectos sobre los flujos globales de comercio (la Organización Mundial del Comercio —OMC— estima que estos aranceles podrían generar una contracción del 1 % en el volumen del comercio mundial en 2025), sino también por los desvíos comerciales que pueden surgir (como la redirección de exportaciones chinas hacia la región). No obstante, el “superarancel” y sus externalidades (como la adopción de medidas de represalia por varios países, especialmente China) pueden generar oportunidades para el agronegocio del Mercosur, como ocurrió durante el primer mandato de Trump.
Desde una perspectiva estratégica, la política comercial de EE. UU. crea incentivos para una postura más favorable en relación con la implementación del acuerdo de libre comercio entre el Mercosur y la Unión Europea. Cabe destacar, sin embargo, que Argentina y Brasil mantienen visiones divergentes sobre el impacto de estas medidas. El presidente Milei, por ejemplo, ha expresado interés en ajustar la política comercial argentina y eventualmente negociar un acuerdo bilateral con EE. UU.
En resumen, las medidas adoptadas por EE. UU. pueden interpretarse como una decisión de facto de abandonar las normas de la OMC. Esto incrementará los niveles de incertidumbre en la economía global. El Programa “Parceiros para Excelência” PAEX de la Fundación Dom Cabral puede asistir a sus clientes en la navegación de este escenario incierto.