El exdiputado por el Partido Liberal Radical Auténtico (PLRA), Celso Kennedy, habló con La Nación/Nación Media acerca de la situación en la que se encuentra la nucleación política y los factores que no pueden dejar de analizar sus directivos, si pretenden recolocar al partido como una opción política viable e instalar su aporte en proyectos de reconstrucción del país.

“De cierto modo, el partido ya ha cambiado en términos de líneas de pensamiento con la salida de Efraín Alegre como presidente del PLRA y la asunción de Hugo Fleitas, en el sentido de que ahora al menos se ha restablecido el funcionamiento del Directorio. Si bien son muy pobres aún las ideas que se debaten, al menos se instala el diálogo constante, pero se debe reconocer que aún existen diversos desafíos por delante”, manifestó el exparlamentario.

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Kennedy remarcó que el trabajo desde las bases resulta esencial, pero que si el PLRA apunta a dejar de conformarse con ser meramente un partido de oposición, también debe trabajar en términos dirigenciales y en la propuesta política que plantea, con el objetivo de contribuir con proyectos de gobierno, sin quedar relegado en el quehacer político y la administración nacional.

“El partido aún está demasiado alejado de la posibilidad de recuperarse como tal. Necesita reencausar su línea política, pero también reconstruir a la nucleación partidaria”, subrayó Kennedy, lamentando además que desde las bases del PLRA no se trabaja para la elaboración de una política de Estado real, la cual debe ser reconsiderada para lograr un rol más activo del partido.

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“En el Paraguay, hoy en día las candidaturas están muy alejadas de las coherencias de ideas, quedando finalmente en función de una innovación coyuntural y circunstancial únicamente para las modas electorales”, manifestó Kennedy, indicando que, aparte de la construcción de líneas políticas más sustanciales a nivel partidario, los dirigentes del PLRA deben trabajar para la construcción de un proyecto político trascendental.

Para el exdiputado, la nucleación política necesita alejarse de la única búsqueda de adherencia, sin trabajar en el fortalecimiento de sus bases, en la identidad partidaria y en la política del partido. Puntualizó que si bien la pluralidad es clave en la elaboración de gestiones públicas, los dirigentes deben tener una misma base ideológica, para evitar el resquebrajamiento innecesario, como sucedió con el PLRA.