En un análisis respecto a la situación política de la concertación conocida como Frente Gausú, en el marco de los sectores que responde a la oposición, el exsenador Jorge Querey, reconoció que la organización política llegó a un punto en que no pudieron organizar a las bases, y no tuvieron la capacidad para estructurarse como partido unificado. Mencionó que tampoco lograron una comunicación eficaz que permita llegar bien a la ciudadanía, por lo que considera que el ciclo del Frente Guasú se cerró, sobre todo aquel equipo que llevó a Fernando Lugo a la presidencia de la República.
El exlegislador evaluó la actual situación de la nucleación política que en la legislatura actual solo cuenta con un solo curul, ocupado por la senadora Esperanza Martínez.
“Creo que nosotros centramos nuestro trabajo en una coherencia parlamentaria, como contrapartida en dos cosas tuvimos como dificultades, no pudimos organizar a la base, no nos dio el cuero para acordar cómo estructurarnos y cómo construir un partido unificado y tampoco acertamos a cómo tener una comunicación eficaz. Yo creo que hoy el ciclo del Frente Guasú se ha cerrado, al menos ese es mi punto de vista”, sostuvo.
Aclaró que como sectores políticos de pensamientos progresistas, seguirán denunciando y criticando lo que consideren oportuno. No obstante, cuestionó la falta de propuestas concretas que muestre que ese bloque que logró la victoria de Lugo en la presidencia, y el espacio que avanzó en aquellos años, hoy día la gente no está viendo nada de eso, según señaló.
“Creo que en este momento si no hay capacidad de rehacer la situación sobre nuevas bases, es lo que yo creo que ahora es el desafío. Por lo menos de mi parte, y de aquellos que estamos muy cercanos estamos comenzando un viacrucis, tratando de hablar sobre ¿qué proponemos? Que la gente pueda ver que no solo golpeando la puerta del colorado es que se consiguen las cosas. Hay que generar la fe y la esperanza en algo nuevo”, expresó el exlegislador.
Agregó que dentro del Partido Frente Guasú, había varios partidos y movimientos políticos, que se podría decir eran pequeños o medianos; y el gran salto que debió hacer como nucleación es lograr la unificación de todos ellos, dijo. “Esto fue un desafío que no se pudo alcanzar por diferentes motivos, desde los más nobles hasta los más tristes”, concluyó.
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