El presidente de la República, Santiago Peña, recomendó al jefe de Estado electo de la Argentina, Javier Milei, tomar medidas duras y rápidas ante el crítico panorama económico por el que atraviesa el vecino país. El economista ya se encuentra en la ciudad de Buenos Aires, para asistir a la asunción del ultraderechista presidente electo en Argentina.

Paraguay necesita que le vaya bien a la Argentina, los lazos son muy profundos. Es cierto que la situación es mucho más dramática que la que había recibido Mauricio Macri en su momento. Mi sugerencia es, aquí no hay margen para el gradualismo, hay que tomar medidas muy duras y muy rápidas porque la gente está sufriendo y este país tiene un enorme potencial”, manifestó en una entrevista con el medio de comunicación argentino TN.

El sistema económico de la Argentina arrastra profundos desequilibrios que lo coloca al borde de una crisis explosiva. De acuerdo a los datos proveídos por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec), la pobreza alcanzó el 40,1% y afectó a 18,6 millones de argentinos.

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“En la Argentina existe un gasto por encima de lo que uno puede. Argentina tiene un problema crónico y hay que ajustar el gasto, pero el ajuste no puede ser en aquellos sectores más vulnerables, el gasto lo tendrán que absorber probablemente aquellos sectores que tienen ingresos más altos. Son decisiones políticas muy difíciles, esto no lo puede hacer un presidente solo, necesita el acompañamiento de toda la clase política y el sector privado”, dijo.

Mientras, la indigencia trepa a casi un 10 % en 2023. Detrás está una inflación interanual del 140 %, un peso devaluado hasta los 350 por dólar al cambio oficial y cerca de mil en el mercado paralelo. A toda esta problemática se suma una deuda pública que convierte a la Argentina en el mayor deudor del Fondo Monetario Internacional (FMI).

“A la larga los subsidios y las restricciones no funcionan. Hay reglas que son de oro. Tenés que tener un Banco Central independiente y el Banco Central tiene que administrar la moneda, no le puede estar financiando al Gobierno”, comentó.

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El mandatario también se refirió sobre la agenda bilateral que impulsarán ambos mandatarios en el transcurso de sus gobiernos. Al respecto, elogió la apertura que existe con las nuevas autoridades argentinas.

Le estamos dando la visión de una diplomacia económica muy activa. Paraguay es el primero que quiere trabajar con Argentina. Queremos estar del lado de los que encontramos soluciones. Queremos tener un diálogo fluido, yo soy de una enorme vocación integradora. Somos los más interesados en que la región pueda integrarse más física, comercial y políticamente”, puntualizó.

Peña mantuvo este último viernes un encuentro con la futura canciller del liberal libertario, Diana Mondino, con quien conversó sobre el conflicto del cobro del peaje ilegal en la hidrovía Paraguay-Paraná durante el gobierno de Alberto Fernández y la millonaria deuda que mantiene la Argentina con Paraguay en torno a la cesión de energía proveniente de la entidad Yacyretá.

“Más allá de discutir el peaje, yo quiero discutir una hidrovía mucho más potente. Se debe buscar beneficios para todos. Lamentablemente, este tema se ha manejado por funcionarios de los ministerios de segundo o tercer rango. La idea es jerarquizar, que los presidentes y cancilleres nos sentemos en la mesa. Yo estoy seguro de que vamos a avanzar”, puntualizó.

El mandatario continuó sosteniendo que “yo hablé en su momento con el presidente Fernández, teníamos esta diferencia, él decía que quería cobrar y yo le decía, ‘podes cobrar, lo que no podés hacer es hacerlo unilateralmente. El problema no era con Paraguay, era con el Tratado y con los cuatro países que estaban del otro lado de la Argentina”.

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