El líder de la bancada del movimiento Honor Colorado en la Cámara de Senadores, Basilio “Bachi” Núñez presentó un proyecto de ley que establece la regularización y control de las organizaciones no gubernamentales, fundaciones y agencias, tras tomar notoriedad el festín desatado en el Centro de Información y Recursos para el Desarrollo (CIRD), con dinero estatal.
De acuerdo a las publicaciones periodísticas de la Unidad de Investigación de Nación Media, se evidenció que en la citada oenegé se realizaba la repartija de honorarios entre los integrantes del clan familiar de Agustín Carrizosa Gubetich, titular del CIRD, del coordinador anticorrupción Carlos Alcaraz de la ONG y otros allegados entre ellos varios operadores abdistas que rogaban votos por la propia exministra del Trabajo, Carla Bacigalupo en redes sociales.
“Son supuestamente sin fines de lucro, ya tuvimos antes de las elecciones generales a las organizaciones que supuestamente se dedicaban a hacer un control electoral como por ejemplo Semillas para la Democracia, pero no cumplieron con su rol, sino que respondían directamente a unas de las candidatas presidenciales. Ahora estamos viendo en las tapas de los matutinos a la fundación CIRD, donde clanes familiares lucran con los recursos presupuestados en Paraguay o que vienen del exterior”, indicó el legislador.
El gobierno de Mario Abdo Benítez, destinó la suma millonaria de G. 6.093 al Centro de Información y Recursos para el Desarrollo con la finalidad de impulsar un proyecto de “Reactivación económica poscovid” lanzado en el 2022 para la supuesta capacitación y fortalecimiento de las Mipymes, sector cuyos representantes denunciaron públicamente no haber recibido beneficios del programa.
La iniciativa que terminó funcionando como una agencia de empleos mediante el festín del dinero público fue lanzada por la entonces ministra de Trabajo Carla Bacigalupo, junto con Alfredo Mongelós, secretario técnico de Sinafocal, y Carrizosa Gubetich, cuyos familiares son altamente beneficiados con el dinero estatal.
Llamativamente sacaron el proyecto en tiempos de campaña política y más coincidencia aún que operadores de la ciudad de Lambaré, departamento Central, zona de influencia de Mongelós, coparon la nómina de contratados.
“Urge un control de las oenegés para tratar de encontrar una trazabilidad de los fondos que reciben y transparentarlas para eso planteamos modificar los artículos 3°, 40° y 43° de la Ley 1535/99 de Administración Financiera del Estado y a la vez se agregará otro donde proponemos crear un Registro Nacional de Organismos no Gubernamentales. Actualmente en el presupuesto de la nación figuran un total de 60 oenegés, el resto no”, cuestionó.