La Contraloría General de la República (CGR) defendió el presupuesto solicitado para la institución ante la Comisión Bicameral del Congreso. El titular de la institución calificó de “ambicioso” el plan de gastos para el 2024, dado que durante el gobierno de Mario Abdo Benítez el presupuesto sufrió de recortes importantes y necesitan mayores recursos para inversión física, viáticos, tecnología entre otros.
“Hemos advertido que la Contraloría en los últimos 10 años no ha tenido un incremento de su presupuesto y en particular en los últimos cinco años ha decrecido en su presupuesto, entonces cada vez nos dan más responsabilidades, hay normativas que nos exigen a nosotros tener mayores competencias, mayor trabajo pero eso no viene acompañado de un mayor presupuesto”, manifestó el contralor Camilo Benítez.
La Contraloría pide unos G. 246.000 millones para el 2024 y de acuerdo a lo expresado por el contralor, con estos recursos se podrá cumplir a cabalidad con las misiones de las instituciones. Benítez manifestó que la institución apunta a realizar una inversión física puesto que en los últimos seis años se gastaron más de G. 8.000 millones en alquileres para el funcionamiento de la CGR.
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“Inversión en internet, tenemos un déficit en eso y necesitamos de mayor tecnología para poder hacer los trabajos de digitalización que tanto se exige. Solicitud de viáticos, cuanto más viático se otorga a la CGR mayores fiscalizaciones se realizan, los viáticos están estrechamente relacionados con las auditorías. La Contraloría es centralizada, no tiene oficinas en el interior, por eso son importantes los viáticos”, explicó.
También se necesita adquirir computadoras y nuevos vehículos. Sobre esto último, indicó que desde hace más de 10 años no se renueva la flota de vehículos y muchos de ellos ya están en estado obsoleto. Camilo Benítez aclaró que todos los rodados se usan para las tareas misionales y que ninguno de ellos es de uso de las autoridades.
Parte del presupuesto se pretende destinar a la creación de rubros para el nombramiento de nuevos funcionarios y para ajustar el salario de los funcionarios, el cual no se actualizada desde hace más de 10 años. “En este tiempo los auditores se recibieron de profesionales y cobran como si fuera que no lo son, esa regularización es importante a los efectos de que los auditores y los funcionarios que hacen trabajos misionales tengan la independencia que tanto se les exige, que sus salarios estén a la altura de sus responsabilidades”, aseveró.