El borrador para las modificaciones de la adenda al convenio con la Unión Europea (UE) fue presentado en la Cámara de Senadores este martes pasado. En la reunión participaron el canciller Rubén Ramírez Lezcano, acompañado de los ministros de Educación y Ciencias, Luis Ramírez, y de la Niñez y la Adolescencia, Walter Gutiérrez, así como los senadores Lizarella Valiente, Basilio Núñez, Juan Carlos Galaverna y Carlos Núñez.

“De un proyecto anterior quedó un saldo de poco más de USD 17 millones, en un presupuesto de USD 1.250 millones. Esto es necesario de entender porque no se debe dar al convenio con la UE una proporción que no tiene, pensando que su cooperación nos va a salvar la vida”, comentó el ministro Ramírez, expresando que el aporte europeo solo será un complemento a los trabajos establecidos para educación y que no constituye la panacea para las inversiones en el sector.

El titular de Educación refirió que el apoyo financiero que se pueda efectuar del convenio con la UE no cambiaría de manera significativa la planificación con la que ya cuenta el MEC, debido a que el presupuesto determinado para la cartera de Estado se encuentra fijado de manera autónoma, para que no dependa de inversiones externas a la institucional. Esto esencialmente para lo referente al alimento escolar y los kits académicos.

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“Todo lo que viene pasa como un complemento. Cooperación significa que cooperan con nosotros, pero quienes marcan las líneas a seguir y deciden qué hacer y cómo llevarlo a cabo somos nosotros; lo importante es contar con una planificación, como ya la tenemos, para que así este tipo de cooperaciones no caigan en un saco roto y puedan acompañar nuestros proyectos”, determinó Ramírez en contacto con la 780 AM.

Puntualizó que tanto la cooperación de la UE como otras tantas más podrán representar simples parches para las gestiones del MEC, si no se reorganizan las inversiones de la institución. Esto teniendo en cuenta que, a decir del secretario de Estado, se debe apuntar con mayor enfoque en la calidad, para lo cual lo ideal es trabajar desde otra perspectiva, cambiando la lógica de centralizar el interés ciudadano y estatal en las cooperaciones internacionales.

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