Tras asumir la Presidencia de la República, Santiago Peña, y la primera dama Leticia Ocampos ofrecieron en Mburuvicha Róga un almuerzo para jefes de Estado y otros representantes de delegaciones extranjeras. En medio de la celebración, el mandatario alzó su copa y brindó por la democracia y la amistad entre naciones. “Con Pedro Alliana, comenzamos hoy este sueño y queremos pedirles que nos acompañen”, solicitó.
Ante sus pares y otros invitados, el presidente de la República reiteró además su compromiso de lucha por la integración y la paz entre las naciones. “Tenemos enormes sueños y el compromiso de luchar por una América integrada, por un mundo en paz y porque nuestra humanidad realmente pueda progresar y cada uno de los ciudadanos pueda vivir mejor”, enfatizó. Peña pidió a los invitados alzar sus copas y brindar por la libertad, la democracia y amistad entre pueblos.
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Sabor autóctono del Paraguay
El menú del cóctel con las delegaciones fue diseñado para resaltar los ingredientes autóctonos de Paraguay. Se utilizaron productos locales como la carne del Chaco, el surubí del río Paraná, verduras y quesos de mercados locales.
El menú estaba compuesto por tres pasos, que incluyen una bienvenida, una entrada, un plato principal y un postre. La bienvenida constaba de una gran variedad de opciones: esferas de vorivori, salsa de queso Paraguay, corteza de chipa guasu, nube de chipa, el tradicional mandio’o chyryry y más.
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Se ofreció además un pira caldo de surubí en bisque y como plato principal costilla chaqueña braseada, aligot de mandioca, poroto manteca, rescoldo de andai y tomate de guavirá en racimo. El postre consistió en una degustación de dulces y cítricos nacionales. Desde cheesecake de queso Paraguay hasta dulce de mamón de Paraguarí en caramelo de yerba mate.
Toda la puesta organizativa estuvo a cargo de Jessica Mirales junto con la empresa que lleva su nombre, así como lo que será el cóctel por la noche en el Palacio de López, previo al espectáculo en la Costanera. La puesta decorativa contó con manteles de ñandutí y encaje ju, tejidos típicos del país. La primera dama estuvo en todos los detalles. Fue su idea que la decoración sea clásica, fina y sencilla.
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