El presidente de la República, Santiago Peña, asistió, luego de su juramento, a la Catedral Metropolitana para la celebración del solemne tedeum, que fue oficiada por el cardenal Adalberto Martínez. Tedeum, una palabra en latín que significa “A ti Dios”, forma parte de un antiguo himno de alabanza en la liturgia católica y representa la acción de gracias a Dios.

“La Iglesia católica tiene el derecho y el deber de acompañar el ser y quehacer de la vida nacional, aportando la riqueza de su enseñanza social, que de hecho es adoptada por muchos jefes de Estado para atender cuestiones relacionadas a las gestiones del Estado”, puntualizó Martínez durante su discurso, apelando además a que desde el nuevo periodo de gestión se construya con justicia y rectitud, favoreciendo la paz social y la felicidad del pueblo paraguayo.

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Compartió además una serie de parámetros sociales que desde la Iglesia católica observan como aspectos prioritarios a ser solucionados, remarcando que esto no significa que la institución religiosa busca generar algún tipo de injerencia o introducirse en el poder, sino que en realidad se procura contribuir al fortalecimiento de la integridad de cada uno de los pobladores.

“Con esperanza hemos tomado nota de cada una de las promesas expresadas por el presidente que hoy inicia su mandato, las cuales tienen relación con promover políticas públicas que favorezcan al bien común de la nación para lograr el desarrollo sostenible y la prosperidad del país”. dijo.

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El cardenal puntualizó que desde la Iglesia velarán por responder contra cualquier tipo de irregularidad, dejando un claro mensaje en contra de la corrupción, afirmando que los intereses de la gestión del gobierno entrante debe marcar una clara lucha contra ese flagelo porque debilita la institucionalidad democrática; exhortó además a que se mantenga la independencia de la justicia, fortaleciendo las labores del Ministerio Público y las responsabilidades de los órganos extrapoderes.

“Nuestra patria debe superar todo tipo de rivalidad y discordia para que se pueda construir el Paraguay que soñamos y necesitamos urgente. Las autoridades públicas tienen especial responsabilidad en el fortalecimiento de la concordia, propiciando el diálogo social para buscar el consenso para el logro del Paraguay que queremos”, puntualizó, aseverando además que la visión de Peña debe centrarse sobre las personas más débiles y vulnerables.

Además, el cardenal remarcó la necesidad de revitalizar la política paraguaya, para instalarla como una herramienta clave en pos del bien común. Subrayó además la necesidad de construir un país más justo, equitativo y fraterno entre las autoridades y la población.

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La celebración del tedeum, tras el juramento de Santiago Peña como presidente de la República, representa una acción de gracias por el nuevo periodo presidencial que inicia. Forma parte del programa de Gobierno y se realiza, además, cada 15 de mayo en conmemoración a las fiestas patrias, aparte de desarrollarse también en honor de la Virgen de Asunción.

De este modo, un emotivo momento se vivió en la Catedral Metropolitana, con una orquesta entremezclada con el sublime canto del coro encargado de llevar a cabo la alabanza. Además, con la bendición del cardenal Martínez se reiteró las altas expectativas en torno a la dupla del Ejecutivo, a la espera de que gobierne con sabiduría, templanza y así también pueda materializar sus proyectos de gestión.