Este 1 de julio el presidente saliente Mario Abdo Benítez presentó su último informe de gestión, cuyo contenido estuvo plenamente basado en logros de su administración, esto sin hacer mención en ningún momento de las deficiencias de su gobierno en cuanto a seguridad, desempleo, entre otras y destacó la economía paraguaya, esto en un momento en que la ciudadanía sufre por un encarecimiento casi generalizado de productos.

“Vemos con satisfacción cómo los números de nuestra gestión en este último año siguieron ingresando a las páginas de la historia y solo esperamos genuinamente que continúen creciendo y fortaleciendo las bases de ese Paraguay pujante que se destacan por la capacidad de trabajo de su gente”, expresó el mandatario dando inicio al recuento de su gestión durante este último año.

Lea también: Discurso de “copamiento” busca confundir y simpatizar con ciertos medios, afirman

Como ya es habitual en los últimos informes de gestión, Abdo Benítez responsabilizó a la pandemia del covid-19 como la causante de no haber podido aplicar las “ideas claras” que tenía para su gobierno. Destacó la macroeconomía del país y afirmó que esta es una de las más robustas de la región, a la vez señaló que Paraguay será uno de los países con mayor crecimiento económico en Sudamérica y que está cerca de alcanzar el grado de inversión.

“Estos hechos dejan ver la previsibilidad de hierro que caracteriza la gestión macroeconómica paraguaya que permanece intacta y posibilitó cosechar triunfos extraordinarios en este último año”, sostuvo Abdo Benítez sin referirse a la situación económica que afecta a la clase media y la población en situación de pobreza y pobreza extrema.

Le puede interesar: Así quedó integrado el Congreso para el periodo 2023-2028

Paraguay se ha mantenido como uno de los mayores exportadores de alimentos a nivel mundial, ubicándose en el tercer puesto como exportador de soja a nivel global y segundo en la región, el noveno en exportación de maíz y el décimo mayor exportador de carne en el mundo.

“Nuestra matriz productiva sigue diversificándose, las exportaciones de bienes manufacturados de origen industrial superaron los USD 1.500 millones en el último año, el nivel más alto del que se tiene registro, esta es una clara señal de que nuestro país está preparado para explorar otras áreas de negocios”, remarcó el jefe de Estado.

Abdo Benítez aseguró que durante estos últimos cinco años se superó la inversión realizada en el sector privado, alcanzado USD 4.300 millones, cifra que correspondería a la mayor inversión privada en la historia del país. “Con tasas de desempleo de las más bajas de Sudamérica y una alta capacidad productiva, puede decirse que la economía paraguaya sigue afianzándose como una de las más robustas regionalmente”, manifestó el mandatario.

Desde el Instituto Nacional de Estadísticas (INE) se había alertado sobre una preocupante tasa de desempleo abierto y esta misma sensación es la que se percibe en las calles donde la gente lamenta la falta de oportunidades laborales.

Abdo Benítez resaltó las obras en infraestructura realizadas durante su gobierno y mencionó que se han construido 4.169 km en estos últimos cinco años. Para graficar su “logro” presentó una tabla en la cual grafica que es el número alcanzada más alto, superando a Alfredo Stroessner. Esta no es la primera vez que el saliente mandatario compara sus “éxitos” con la dictadura.

Las inversiones realizadas al sistema eléctrico durante esta gestión permitirán a Paraguay acceder y disponer de la totalidad de la energía que produce Itaipú, reveló el presidente actual. Sin embargo, esto debe ser contrastado, puesto que incluso el presidente de la Administración Nacional de Electricidad (Ande) había manifestado en entrevistas anteriores que las inversiones deben seguir en los próximos años, puesto que el país está lejos aún de alcanzar la capacidad plena.

El jefe de Estado defendió el acuerdo tarifario de Itaipú, el mismo que fue cuestionado por expertos por ceder ante la voluntad del Brasil. “Este acuerdo tarifario permite contar con recursos adicionales como nunca antes, con un monto de USD 409 millones, es decir 1 % del producto interno bruto (PIB)”, expuso.

“La salud ocupó un sitio central en la perspectiva de este gobierno”, expresó el presidente afirmando que durante su gestión existió un récord en inversión en salud y educación, alcanzando históricas ejecuciones presupuestarias, no obstante, esto no condice con la realidad actual.

“Mi postura contra el crimen organizado es inflexible, las redes delictivas transnacionales ponen en peligro nuestra forma de vida en democracia y pretenden sustituir las instituciones con dispositivos paraestatales”, dijo Abdo en este último informe.

Durante el gobierno de Mario Abdo Benítez, varios de sus ministros fueron procesados por sus vínculos con el narcotráfico, tales como Joaquín Roa, exministro de la Secretaría de Emergencia Nacional (SEN), y Arnaldo Giuzzio, exministro de la Secretaría Nacional Antidrogas (Senad) y posteriormente ministro del Interior.

En la gestión del mandatario saliente también se dieron de baja a los escáneres en los puertos para el control de cargas y se registró la mayor cantidad de exportación de droga de Paraguay con destino a Europa y se estima que el envío de cocaína alcanzó los USD 25.000 millones en los últimos tres años.