Este martes, el expresidente de la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol) Juan Ángel Napout, condenado y en prisión en Miami, Estados Unidos, debía someterse a una cirugía ocular ya que su vista está muy deteriorada. Virginia Napout, hermana del condenado, afirmó que la cirugía no se realizó y aseguró que la justicia norteamericana está violando sus derechos humanos.
“No le operaron, él tenía promesa por escrito de EE. UU. Ayer le llevaron al hospital, le tuvieron 6 horas, la doctora que le atendió ni sabía para qué se iba, le hizo un chequeo y le devolvió a la cárcel. Le hicieron chequeo de rutina para decirle la misma cosa, que necesita operación urgente. Es la cuarta vez que le prometen y no cumplen”, expresó en contacto con La Nación/Nación Media.
La misma contó que su hermano tiene indicada la cirugía de la catarata hace más de dos años. El exdirigente deportivo desde hace rato solo ve sombras del lado derecho del ojo, mientras que del lado izquierdo la catarata está avanzando bastante rápido. Virginia Napout señaló que el preso sigue teniendo derechos, porque solo se le priva la libertad, no así el derecho a la salud, agregó que los del buró de prisiones tienen que cuidar de su salud.
Asimismo, califica el hecho como tortura psicológica y violación a todos los derechos humanos tanto para Juan Ángel como para su familia. “Está claro que es una violación de los derechos humanos y una tortura psicológica. También hay discriminación, porque si él fuera americano, él estaría el mes que viene en su casa”, indicó.
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“No es americano y eso le juega en contra”
El extitular de la Conmebol tiene fijada una audiencia en Estados Unidos este viernes 23 de junio. Se trata de una figura jurídica llamada liberación compasiva, donde la persona debe reunir ciertos requisitos para poder pedir, Juan Ángel completó esos requisitos y eso se presentó. La familia participará de la audiencia desde nuestro país por medios telemáticos, según comentó la hermana del condenado.
“La Fiscalía ya dijo que iba a oponerse, mañana ambas partes presentarán sus argumentos y la jueza es la que tiene que decidir. Pensamos que es altamente improbable que le den porque, otra vez, no es americano, y eso definitivamente le juega en contra”, enfatizó Virginia.
Carta dirigida a la OEA
La familia del exdirigente deportivo también recurrió a la Organización de Estados Americanos (OEA), a través de una carta enviada el 13 de junio al secretario general de la OEA, Luis Almagro, en la que se expone detalladamente la situación jurídica y personal por la que está atravesando el condenado.
En la misma, solicitan que la OEA pueda instar a que se dé cumplimiento a la Convención entre Paraguay y Estados Unidos, el cual tiene por objetivo facilitar el traslado de los condenados a su país de origen para cumplir sus condenas cerca de su familia y su entorno social.
Asimismo, ruegan que se accione para garantizar el respeto de los derechos de los prisioneros y sus familias en virtud de los principios de la mencionada Convención. Al respecto de la solicitud del cumplimiento de ese tratado, en abril del año pasado dijo que eso está pendiente, puesto que aún no recibieron ninguna respuesta. “Vamos a seguir haciendo todo lo que está a nuestro alcance y si eso significa recurrir a organismos de derechos humanos, vamos a hacerlo”, agregó la hermana.
Discriminación
Juan Ángel Napout cumple una condena de nueve años en una prisión de Miami por el caso de corrupción FIFAgate y según lo manifestado por el mismo en una carta abierta, se encuentra con un delicado estado de salud. La fecha estipulada de su salida de prisión marca el 9 de agosto del 2024, luego sería deportado, donde también tardaría el proceso de regresar al país.
Tras finalizar la nota con La Nación, Virginia Napout expresó: “Yo quiero saber cómo nos van a devolver a mi hermano, si no le hacen ningún estudio preventivo, ellos deben encargarse de su salud. El fue culpable de un delito, está cumpliendo su condena, genial, pero... ¿y después?, ¿no le vas a cuidar su salud, no le vas a tratar como un ser humano, por qué le tratas diferente, porque no es americano?, es una discriminación, una vergüenza, y una irracionalidad”, sentenció.
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