La Cámara Vial Paraguaya (Cavialpa) fue sede del último spot proselitista de Efraín Alegre, en el que aparece con Pedro Fadul; sin embargo, el gremio no estaba al tanto del uso de su sala de reuniones para fines propagandísticos. En comunicación con La Nación/Nación Media, el presidente del gremio, Paul Sarubbi, señaló que el caso ya fue derivado a un tribunal de la organización, donde se analiza aplicar una sanción disciplinaria al socio que impulsó el video proselitista.

“En nuestro estatuto se reglamenta lo que se puede o no hacer y las actividades políticas o proselitistas no están permitidas. Un socio particular pidió reservada la sala de reuniones y terminó siendo un encuentro propagandístico, pero esto fue una verdadera pena porque nosotros somos apolíticos y debemos mirar con una visión a futuro, en pos de construir el gobierno que necesita el Paraguay independientemente de los colores”, dijo Sarubbi.

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Guillermo Alonso Díaz Benza, representante legal de la firma Construtex SA, fue el socio que habría permitido y acompañado la realización del material audiovisual a favor del candidato presidencial por la Concertación. Por ello conversaron con la comisión directiva, para derivar el caso al tribunal del gremio y que se tomen las medidas necesarias con el socio que no respetó el estatuto de la organización.

El estatuto de Cavialpa también establece claramente que los socios no podrán inmiscuirse en movimientos políticos o religiosos ni recibir subsidios de organizaciones de las clases mencionadas, ya sean nacionales o extranjeras. “Normalmente los gremios deben ser independientes de cualquier cuestión ideológica, aparte tenemos miembros de todos los partidos políticos, por lo cual no podemos tomar una postura a favor de una u otra organización partidaria”, remarcó el representante del gremio.

Sarubbi recordó que desde Cavialpa los intereses giran en torno a la solución de los problemas transversales al gremio, por lo cual se encuentran abocados al cobro de la deuda que el Estado tiene con los sectores de la construcción. Recordó que la deuda asciende a unos US$ 350 millones y que más de 300.000 colaboradores se ven afectados por la falta del cobro de sus servicios.

“Estamos hablando con el Banco Central del Paraguay para que nos dé una flexibilización con respecto a la capacidad crediticia. Ahora pensamos a futuro, lo que queremos es trabajar en una línea para encarar de manera diferente el desarrollo de la infraestructura del sector de la construcción para el país; hay que crear las condiciones para que la nación se siga desarrollando y esa es nuestra meta”, expresó.

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