En Santo Domingo, República Dominicana, se desarrolla la XXVIII Cumbre Iberoamericana con presencia de diversos jefes de Estado que forman parte del grupo. En medio de la cumbre, Paraguay hizo pública una propuesta que busca reforzar el apoyo a países en desarrollo sin litoral, que posteriormente fue aprobada por todos los mandatarios que se encontraban presentes en la reunión regional.

La propuesta consiste en un Comunicado Especial de apoyo, en el cual se señala que los mandatarios recuerdan y reafirman su compromiso con el objetivo general del Programa de Acción de Viena de abordar de manera más coherente las necesidades y los desafíos especiales en materia de desarrollo de aquellas naciones sin litoral, que se enfrentan a desafíos más demandantes por su carencia de una salida al mar, la lejanía de sus territorios y sus limitaciones geográficas.

Teniendo en cuenta que Paraguay es uno de los países que forma parte de ese grupo, solicitó el compromiso colectivo de todos los países iberoamericanos para reforzar la cooperación para el progreso de los países en desarrollo sin litoral. Esto, recordando además los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) del cual forman parte, que constituyen un llamamiento universal para poner fin a la pobreza, proteger el planeta.

Además, se reconoce la importancia de la aplicación plena y oportuna del Acuerdo sobre Facilitación del Comercio (AFC) para contrarrestar los elevados costos comerciales a los que se enfrentan los países en desarrollo sin litoral, con el objetivo de promover la libertad de tránsito. Esto sin mencionar la importancia de movilizar los recursos suficientes para acelerar la aplicación del AFC y aumentar la ayuda para el flujo comercial regional.

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El presidente de la República paraguaya, Mario Abdo Benítez, llamó a la unidad regional durante su disertación, respecto a los valores de la democracia y el respeto a los Derechos Humanos. También hizo hincapié en promover la cultura del trabajo para el desarrollo de los pueblos, destacando que esto debe ir en consonancia con el fortalecimiento de las instituciones, la construcción de políticas previsibles a largo plazo y la posibilidad de otorgar mayores garantías al que produce y al que trabaja.

“A pesar de los momentos difíciles que vivimos, vemos esto como una gran oportunidad para que, en este foro podamos fortalecer el concepto de la integración. También es importante que levantemos nuestras voces cuando las democracias y la institucionalidad están en riesgo y creo que hoy estamos viviendo un momento inmejorable para profundizar el concepto de integración”, expresó el primer mandatario.

Refirió que las naciones de América Latina y el mundo, en especial el Mercado Común del Sur (Mercosur) y Europa, se encuentran en un momento ideal para fortalecer el proceso de integración. Subrayó que desde el bloque del Sur existe un potencial gigantesco para generar aportes mundiales en términos de seguridad alimentaria, produciendo alimentos para 1.500 millones de habitantes en la región; así como en lo referente a la energía renovable, donde Paraguay con Brasil producen 100% de esa riqueza.

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